Cristiano alivia el sufrimiento ante Hungría

Gulacsi desquició a la actual campeona que no desatascó el partido hasta los últimos cinco minutos

Cristiano se convirtió en el máximo goleador de la historia de las Eurocopas y el único que ha jugado cinco

Cristiano celebra su gol de penalti.

Cristiano celebra su gol de penalti.

Arnau Montserrat

Explicar con un 0-3 final y con doblete de Cristiano que Portugal sudó tinta para ganar a Hungría suena a chiste. Pero es así. Los húngaros, con cuchillo entre los dientes durante los 90 minutos, resistieron 85 minutos de vendaval luso que acabó desesperado ante la exhibición de Gulácsi. Incluso se adelantaron, pero en fuera de juego. La cara de susto que reinaba entre los actuales campeones desapareció con el gol de rebote de Guerreiro. Apareció entonces Cristiano con un doblete en un abrir y cerrar de ojos. Ya es el máximo goleador de la historia de la competición y el único que lleva ya cinco participaciones en la Eurocopa a sus espaldas.

Hungría-Portugal

Eurocopa

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3
Alineaciones
Hungría
Gulacsi; Botka, Orbán, Szalai; Lovrencsics, Kleinheisler (Siger 78'), Nagy (Varga 89'), Schäfer (Négo 66'), Fiola (Kevin 89'); Sallai (Schön 78'), Szalai.
Portugal
Rui Patricio; Semedo, Pepe, Días, Guerreiro; Pereira, Carvalho (Renato 81'); Bernardo Silva (Rafa Silva 71'), Bruno Fernande (Moutinho 89')s, Jota (André Silva 81'); Cristiano.

Portugal se encontró con 60.000 espectadores en Budapest y un estadio convertido en olla a presión para ayudar a los húngaros a rascar algo provechoso de la visita de la actual campeona de Europa. Los lusos fueron mejores, merecieron irse al descanso con uno e incluso dos goles de diferencia pero entre Gulacsi y la mala puntería, también de Cristiano, los de Fernando Santo no lograban abrir la lata.

Jota tuvo la primera del choque pero se encontró con un tremendo enfado de un CR7 que tenía toda la razón del mundo de pegar un grito al cielo. EL jugador del Liverpool no vio al de la Juventus completamente solo dentro del área y decidió disparar. Una de esas jugadas que sabes que si pasan por los pies de Ronaldo acaban en gol.

No fue al único jugador portugués al que desesperó. Jota volvió a ser protagonista pasada la media hora de juego cuando, ofuscado con la portería, no vio la llegada de Bruno Fernandes y le robó el tiro. El del United apareció poco en los primeros 45 minutos pero al filo del descanso pudo desatascar el partido. Mandó un balón al corazón del área pero Cristiano erró. A dos metros de Gulacsi, que estaba vendido, la mandó por encima del travesaño.

Portugal siguió igual de decidida en la segunda mitad y fue Pepe el que se llevó las manos a la cabeza con la estirada de Gulacsi a un remate de cabeza suyo. El portero desquició a los lusos que veían como con el paso de los minutos el 0-0 se enquistaba y en un grupo con Francia y Alemania, empatar con Hungría era un pésimo resultado. El nerviosismo se notaba también en la zona de banquillos donde el cónclave del staff buscaba soluciones para encontrar un gol que volvía a negar el portero del Leipzig a un tiro de Bruno Fernandes desde su casa. No había manera.

La solución la encontraron con un Rafa Silva que ejecutó a la perfección su papel de revulsivo. A cinco minutos para el final, se inventó un centro para la llegada de un Guerreiro que se ayudó en la bota de Orbán para tirar a la derecha y que el balón saliera disparado al lado contrario. Respiraba Portugal. Minuto y medio después, el propio Rafa Silva provocaba un penalti que servía en bandeja el protagonismo a Cristiano.

Ronaldo redondeó sus extasis final con el tercero. Un golazo colectivo de los portugueses. Deja atrás a Alan Shearer y ya lidera la tabla de goleadores de todos los tiempos del torneo. El grupo de la muerte ya lo es menos para la campeona.