Quagliarella hace historia en el set en 'bianco' de Italia a Liechtenstein

Quagliarella, gran protagonista del encuentro

Quagliarella, gran protagonista del encuentro / EFE

Roger Payró

La ‘nuova Italia’ de Roberto Mancini confirmó las buenas sensaciones logradas en el triunfo ante Finlandia en la primera jornada y en la segunda se dio un auténtico festín ante la débil Liechtenstein (6-0). Quagliarella anotó un doblete de penalti y se convirtió en el jugador más veterano de la historia en ver portería con la selección italiana.

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Clasificatorio Eurocopa 2020

6
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Alineaciones
Italia
Sirigu; Mancini, Bonucci (Izzo, 80'), Romagnoli, Spinazzola; Jorginho (Zaniolo, 58'), Sensi, Verratti; Politano, Kean y Quagliarella (Pavoletti, 72').
Liechtenstein
Buchel; Wolfinger, Kaufmann, Hofer, Goppel; Sele (Malin, 46'), Polverino, Wieser, Kuhne (Meier, 69'); Salanovic (Buchel, 82') y Hasler.

Dominio de principio a fin. Este es el resumen del duelo en el que Italia acumuló decenas de disparos. Se libró el combinado de Kolvidsson en el primer cuarto de hora pero al final acabó cediendo ante la lógica y Sensi abrió la lata. Spinazzola, que cuajó un gran partido por la izquierda, se deshizo de sus rivales y puso un centro templado que el centrocampista del Sassuolo remató a la red con un gran testarazo.

Quagliarella tenía prisa por hacer historia y solo dos minutos después marcó, aunque se lo anularon por un dudoso fuera de juego, y en la siguiente jugada solo Buchel le negó el tanto achicando bien el espacio. El veterano delantero acabó encontrando el gol, pero antes fue el turno para un incombustible Verratti que subió el 2-0 al electrónico con un gran disparo tras una recuperación en el área rival.

Duelo solucionado antes del asueto

El asedio italiano era ostensible y los zagueros liechtensteinianos se multiplicaron hasta tal punto que empezaron a usar hasta las manos para defenderse. Primero fue Hasler en el 34’ y luego Kaufmann en el descuento de la primera parte. Ambas acciones fueron sancionadas con penalti -la segunda con roja directa- y ambas ejecutadas magistralmente por Quagliarella, que se apuntó el doblete desde los once metros.

Con el 4-0 el partido ya estaba visto para sentencia, pero Italia tenía ganas de lucirse en el Ennio Tardini y Spinazzola casi marca un auténtico golazo en el 50’ tras una vaselina al portero cuando apenas tenía espacio. Las ocasiones se sucedían y hasta Romagnoli rozó el tanto en una subida al ataque que acabó con un remate que se le perdió por nada.

El quinto tanto se olía y acabó llegando. Spinazzola centró, Quagliarella la cedió con la testa y el joven Kean, que ya se estrenó como goleador ‘azzurro’ ante Finlandia, marcó a placer también con la cabeza. Futuro prometedor para este chico que ya avisó con un tiro al palo en la primera mitad después de una jugada individual donde dejó muestras de su calidad.

Mancini dio descanso a un Quagliarella que fue despedido entre aplausos por el respetable reunido en Parma y su lugar lo ocupó Pavoletti, que solo cuatro minutos después de su ingreso ya vio portería. El delantero del Cagliari vio como un Buchel evitó su primera intentona con la cabeza pero él mismo cazó el rechace y cerró el set en blanco para el combinado italiano, que sigue convenciendo en la 'era Mancini'.