Un hat trick de Cristiano salva la primera final de Portugal

Portugal salvó la primera patata caliente. Con Ucrania ya como líder de grupo y con billete sellado para la Eurocopa solo falta una vacante en el grupo B. Un punto por encima de Serbia, Portugal necesitaba ganar sí o sí a la débil Lituania que solo sumaba un punto en su casillero. Para ello, se agarró al de siempre, Cristiano Ronaldo.

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Clasificación Eurocopa 2020

POR

6

0

MOL

Alineaciones

Portugal
Rui Patricio; Pereira, Fonte, Dias, Rui; Rubén Neves, Bruno Fernandes (Moutinho 72'); Pizzi, Bernardo Silva (Bruma 66'), Cristiano Ronaldo (Jota 83'); Paciencia.

Moldavia
Setkus; Vyautas, Edvinas, Palionis, Saulius; Mantas (Deivydas 57'), Domantas, Vykintas; Paulius (Justas 72'), Fedor (Donatas 81'), Arydas.

Goles

1-0 M.7 Cristiano, 2-0 M.22 Cristiano, 3-0 M.52 Pizzi, 4-0 M.56 Paciencia, 5-0 M.63 Bernardo Silva, 6-0 M.65 Cristiano.

Árbitro

Ruddy Buquet (francés) T.A.: Palionis (27'), Mikoliunas (80').

Incidencias

Estadio Algarve.

El jugador de la Juventus se puso a los lusos a la espalda y acabó con el nerviosismo ya en el minuto siete. Él fue quien provocó el penalti y evidentemente lo transformó. El doblete se lo apuntó apenas quince minutos después con un auténtico golazo que recordó al Cristiano de antes. Balón fuera del área y golpeó con potencia, rosca y pare dentro. La papeleta estaba casi finiquitada.

Pudo apuntarse el hattrick con un penalti que finalmente no fue señalado. El que sentenció el partido y abrió un tormenta ya en la segunda mitad fue el jugador del Benfica, Pizzi, con un espectacular remate que rebotó en el travesaño antes de entrar. Paciencia alargó su momento dulce con el Eintracht dejando su huella con el cuarto, Bernardo se apuntó el quinto y Cristiano cerró su sensacional choque con el hattrick. Todo en apenas veinte minutos de la segunda mitad. 

Portugal con el 6-0 bajó el pistón al partido y esperaba noticias de lo que hacía Serbia en en su partido ante Luxemburgo para ir tranquilos a la última cita ante Luxemburgo. Los serbios no fallaron y pese a que sufrieron para cerrar el triunfo también se aferran a la última vida. Todo abierto.