Andorra, la fuga de deportistas y youtubers

La reciente mudanza de Rubius al Principado ha vuelto a revivir el debate de los impuestos

En la parrilla de MotoGP, un total de nueve pilotos residen en Andorra

Rins y Viñales, dos de los pilotos de MogoGP que tributan en Andorra

Rins y Viñales, dos de los pilotos de MogoGP que tributan en Andorra / AFP

Jordi Delgado

Jordi Delgado

El tema de actualidad estos últimos días ha sido la reciente ‘fuga’ a Andorra de uno de los youtubers más famosos en todo el mundo. El Rubius. Rubén Doblas, que es su nombre real, se une a TheGrefg, David Cánovas, que ya lo hizo hace un tiempo, y siguen a muchos de su sector, pero también a deportistas, que eligen el Principado por sus políticas fiscales, entre otras cosas.

Los influencers son un gran foco para mucha gente, lo que aporta ingresos, muchos ingresos. Recientemente, TheGrefg batió el récord de audiencia en Twitch, con 2,5 millones de espectadores, y El Rubius suma casi 74 millones de seguidores combinando sus redes. Otros, con menos suscriptores pero con una audiencia que les permite amasar fortunas como Wall Street Wolverine, Willyrex, Vegetta o Lolito Fdez, emprendieron el mismo camino. La reciente ‘fuga’ se estima que con internet ha amasado un patrimonio estimado entre 5,8 millones y 9 millones de euros, según calculan las webs Celebrity Net Worth y Statsmash.

 “Obviamente [pagar menos impuestos] es un plus, pero si fuera solo por eso me habría ido hace muchos años”, decía El Rubius en uno de sus vídeos.

Ibai, por su parte, otro de los grandes influencers de este país, ya ha confirmado que no se va a mover: "Yo estoy bien aquí y me parece un buen acto tributar aquí como hace todo el mundo”.

A nivel deportivo, en MotoGP, la parrilla está llena de viviendas en Andorra. Fabio Quartararo, Maverick Viñales, Joan Mir, Jack Miller, Alex Rins, Tito Rabat, Iker Lecuona y los hermanos Espargaró tienen su residencia allí. Marc Márquez se compró una y levantó los rumores, pero por el momento sigue viviendo en su Cervera natal y tributando en España.

Jorge Lorenzo vivió un tiempo en el Principado, aunque ahora se ha vuelto a mudar, para residir en Suiza, donde también lo hace Dani Pedrosa.

Siguiendo el mundo del deporte, otros nombres más conocidos son los ciclistas Purito Rodríguez, Esteban Chaves, Dan Martin, Dani Moreno o Jonathan Castroviejo. Patry Jordán, deportista e influencer, vive ya allí desde hace cuatro años.

La pionera fue Arantxa Sánchez Vicario, que a finales de los ochenta dijo tener la residencia en Andorra, pero Hacienda le hizo tributar aún en España por sus entrenamientos y sus movimientos en las tarjetas de crédito, demostrando que su residencia estaba en Barcelona.

Vivir en Andorra para disfrutar de sus ventajas en el fisco no significa tener que pasar en el pequeño país de los Pirineos cada día del año, solo bastan con 183 días.

Para tributar, cualquier persona necesita solo tener el historial policial limpio, demostrar haber comprado o alquilado una vivienda en tierras andorranas, y depositar 50.000 euros Instituto Nacional de Finanzas. Si la mudanza es con la familia, se tienen que pagar 10.000 por cada miembro adicional. Como el permiso de residencia no les permite trabajar en el Principado, los que eligen esta opción tienen que demostrar que disponen de ingresos o patrimonio suficientes para subsistir sin trabajar, como poco el 300% del salario mínimo. Algo que encaja perfectamente con las condiciones de los influencers que tienen altos ingresos por su contenido, pero también para los deportistas, como, por ejemplo, los pilotos.

Las grandes fortunas tienen que pagar un 10% máximo de impuestos, y el IRPF se queda en el mismo porcentaje. Tributando en España, esa cifra se eleva al 50 o 55%. Ese 10% no varía en base a los ingresos, por lo que tanto mileuristas como millonarios pagan ese porcentaje.

Para otorgar esos permisos, en cambio, Andorra estipula una cuota anual que varía. Según informa La Vanguardia, en 2021 es de “490 visas de residencia para personas que no realizan actividades lucrativas en el país, aparte de 30 para quienes deseen realizar operaciones económicas con proyección internacional y otras 30 para deportistas relevantes”.

Otros beneficios incluyen que los accionistas de una empresa no tributan por el impuesto sobre rendimientos de capital, y tampoco hay impuestos de sucesión o herencia, ni siquiera sobre el patrimonio. El IVA español, conocido en Andorra como IGI, es del 4,5%. A pesar de todo ello, el Principado no se considera un paraíso fiscal, pero sí un destino muy suculento para las grandes fortunas.