El Espanyol logra un triunfo de Primera ante el Rayo

Los de Galca desaprovecharon, especialmente en la segunda parte, varias ocasiones de gol muy claras para dejar sentenciado el enfrentamiento mucho antes y sin necesidad del tormento que debieron aguantar para celebrar el triunfo.

A GOLPE DE GOLAZOS

Tres fueron los tantos que se vieron en Cornellà. Goles muy bonitos. El menos agradecido fue el 1-0 de Abraham -su rendimiento en estas últimas semanas es una de las notas más destacadas de los espanyolistas-, que empalmó muy bien un centro raso de Marco Asensio. Gran gol también el de Bebé, que era el empate a uno en pleno festival ofensivo local, con un disparo muy duro nada más pisar área (66’); y golazo con ovación incluida el de Hernán Pérez (76’) que enganchó perfectamente un rechace de la defensa madrileña.

El Espanyol-Rayo tuvo el guión de partido esperado. El conjunto blanquiazul no tuvo reparos en cederle el balón al rival, pero supo cerrarle todas las vías de creación y presionando con mucha intensidad salió con relativa facilidad a la contra. Fue el encuentro de la temporada donde los espanyolistas tuvieron más ocasiones para marcar y algunas muy claras. Pero acabó sufriendo porque le faltó acierto.  Burgui tuvo tres muy claras y un remate de Marco Asensio lo despejó Quini casi de la misma línea de gol.

Galca echó mano, como se esperaba, del trivote y ese sistema de juego (4-1-4-1) le está dando muy buenos resultados pues ha sido el utilizado en las tres últimas victorias de los blanquiazules. Anoche logró que el Rayo no le inquietase y que Pau fuese casi un espectador más del encuentro.

El 2-1 que señaló el marcador al final del encuentro dejó en un segundo término la actuación de Fernández Borbalán que, con 0-0 en el marcador, no quiso saber nada de un más que probable penalti de Joni a Óscar Duarte, que lo derribó durante un saque de córner. Pero más claro fue el agarrón de Crespo a Gerard Moreno en el minuto 34 que el colegiado sí pitó falta pero no mostró la tarjeta amarilla, que habría sido la segunda para el defensor rayista.

El Espanyol sale reforzado, muy reforzado, tras el 2-1. Esa es la línea que le permitirá asegurar la permanencia aunque debe recapacitar sobre el escaso acierto que tiene en ataque; mientras la derrota aumenta la presión sobre un Rayo Vallecano que fue fiel a su principio de jugar a fútbol, de querer jugar, pero sin capacidad para generar fútbol. Paco Jeméz tiene una idea muy clara, pero ayer pudo salir vapuleado de Cornellà por un equipo que aún sigue buscando cual es su fórmula y filosofía de juego.

ASÍ QUEDA LA CLASIFICACIÓN DE LA LIGA