Un partido dramático... para el Huesca

Es el momento. Tras poner fin a la nefasta racha de resultados negativos, el Espanyol de Rubi tiene dos partidos consecutivos en el estadio para, por un lado, empezar a tener la permanencia bien encaminada y, por otro lado, fijarse metas más ambiciosas como sería apuntar a Europa. Huesca y Valladolid, pues, van a marcar, y mucho, a los espanyolistas. El primer obstáculo es el Huesca.

El encuentro de esta noche es, sin duda, muy especial para el técnico catalán. En el Huesca vivió quizás el momento más interesante en su carrera en los banquillos consiguiendo el histórico ascenso a Primera División. El conjunto aragonés llega a Barcelona muy presionado pues sus opciones de seguir agarrado al sueño de salvarse pasa por obtener un buen resultado ante el Espanyol. La derrota le dejaría, prácticamente, sentenciado.

dos jornadas decisivas

No se esperan grandes novedades en la alineación que presentará inicialmente el cuadro local. Rubi, no obstante, ha podido recuperar efectivos de cara al futuro. Vuelve Dídac Vilà, tras superar las molestias que le impidieron acudir a Mestalla, que se perfila como titular esta noche; pero lo más destacado es el regreso de Hernán Pérez, tras un mes de baja. Con el paraguayo aumentan las alternativas para el juego de banda.

La plantilla se ha conjurado para sumar hoy los puntos y lograr ya su cuarta jornada consecutiva sin perder. La victoria sería un primer paso para empezar a pensar en la salvación y, además, podría abrir de nuevo el baúl de la ilusión europea. “Los próximos cuatro o cinco partidos marcarán si podemos pelear por algo o nos quedamos en zona de nadie”, apuntaba Rubi en la previa.

Vencer hoy al Huesca y ratificarlo con una posterior victoria sobre el Valladolid, que visita el estadio en la próxima jornada del campeonato, dejarían al equipo blanquiazul en una posición muy interesante en la clasificación justo en el momento de entrar en la fase decisiva de la competición.

El Huesca llega al estadio como colista de la categoría, pero hará bien el conjunto espanyolista en no confiarse lo más mínimo. Es un equipo que está muy necesitado y eso le hace, especialmente, más peligroso. Francisco podría cambiar el dibujo táctico y jugar con cinco defensas en busca de un triunfo que es imprescindible para seguir soñando. El conjunto aragonés apura sus últimas opciones en Cornellà/El Prat.