Tello hurga en la herida del Espanyol

El Betis remonta en Cornellà y el Espanyol suma cinco derrotas consecutivas

La remontada dle Betis en Cornellà / LALIGA

Alba López

Las buenas sensaciones que transmitió el Espanyol otrora no tan lejana han quedado en agua de borrajas. Ayer el equipo de Rubi sumó su quinta derrota consecutiva en LaLiga, tercera en el RCDE Stadium. Por lo visto, el despertador perico sigue sin pilas. Fue el exazulgrana Tello, además, quien hurgó en la herida blanquiazul con un precioso gol de falta a cinco minutos para el final. Peor, imposible; es la pesadilla que no acaba. 

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LaLiga

1
3
Alineaciones
Espanyol-
Diego López; Rosales, David López, Duarte, Pedrosa; Marc Roca, Granero (Darder, 68'), Víctor Sánchez; Baptistâo (Piatti, 78'), Sergio García; Borja Iglesias (Hernán Pérez, 55').
Betis
Pau López; Francis, Mandi, Bartra, Sidnei, Junior (Tello, 41'); Carvalho, Canales, Lo Celso; Joaquín (Javi García, 88'); Loren (Sanabria, 71').

Fue el Espanyol feliz el del arranque del encuentro, ese que no da tregua a su rival en la salida de balón y nunca pierde la compostura atrás. La línea de presión espanyolista ahogó el juego del Betis y arriba Sergio García generó muchos problemas a la zaga heliopolitana con su movilidad.

Las buenas intenciones pericas, sin embargo, fueron diluyéndose con el paso de los minutos. Porque el equipo de Setién dio con la fórmula para batir líneas, por un lado, y por otro porque el Espanyol se echó demasiado hacia atrás cuando le tocó defender.

El Betis, al cuarto de hora, estuvo a punto de poner el partido patas arriba tras un penalti tan claro como absurdo de Rosales sobre Junior. Lo evitó Diego López adivinando las intenciones a Lo Celso desde los once metros. El meta gallego se tiró abajo a su izquierda y acertó de pleno.

Las alegrías, como las penas, a veces no vienen solas. Así sucedió ayer en Cornellà -El Prat, ya que apenas unos minutos después el alborozo fue completo cuando Sergio García se adelantó a Mandi en el primer palo y mandó el centro desde la derecha de Baptistao a la red con la puntita de la bota. Medio gol corresponde al brasileño, que alcanzó el balón sobre la misma línea de fondo cuando ya nadie creía que sería capaz de hacerlo. La fe mueve montañas.

De ahí al final de la primera parte poco fútbol más se vio, hasta que al filo del descanso irrumpió Canales como un elefante en una cacharrería. La jugada del talentoso mediapunta cántabro recordó a la que le hizo Bale Bartra en la Copa del Rey de 2013-2014, aunque en esta ocasión el bético fue más generoso que el galés y tras dejar sentado a Marc Roca regaló el gol en bandeja a Lo Celso, quien llegando como un tráiler desde atrás fusiló a Diego López.

El jarro de agua fría pudo helar al Espanyol, pero nada más lejos de la realidad. Tras el paso por vestuarios el equipo perico saltó al campo con mucha determinación y generó dos ocasiones claras en apenas cinco minutos. Ayudó el planteamiento suicida del Betis, que seguía empeñado en sacar todos los balones jugados desde atrás. Ese empeño innecesario habilitó a Baptistao, quien con todo a su favor disparó al muñeco tras revolverse en el punto de penalti; y dejó solo después a Borja Iglesias ante Pau López. Cuando el punta se preparaba a rematar apareció Mandi de lanada para rebañarle el balón desde el suelo. 

Sorprendió entonces Rubi dando entrada a Hernán Pérez por Borja Iglesias y la permuta sentó fatal a la parroquia blanquiazul. Sin su hombre de referencia el Espanyol se vio perdido. La aparición de Darder tampoco despejó el panorama ante un Betis que 'piano piano' volvió a hacerse con el timón del partido. Aun así, Sergio García tuvo en sus botas el 2-1 en una acción aislada. La grada reclamó penalti sobre Falete, pero tras consultar con el VAR Sánchez Martínez mandó reemprender el juego. 

El empate parecía inamovible, pero el Betis no había dicho su última palabra. La pronunció Tello a falta de cinco minutos para el final convirtiendo un libre directo que llevó el extásis a la zona del RCDE Stadium donde se encontraban los centenares de seguidores verdiblancos que acudieron a ver el partido. Con el Espanyol ya volcado en busca del empate llegaría el tanto de la sentencia en la prolongación, obra de Duarte en propia puerta tras un jugadón de Lo Celso por la izquierda.