Quique Sánchez Flores se muestra apenado por el descenso perico

Quique Sánchez Flores, en su etapa como entrenador del Espanyol.

Quique Sánchez Flores, en su etapa como entrenador del Espanyol. / RCDE

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Fue la gran apuesta de Chen Yansheng para el banquillo perico en la campaña 2016/17, pero el proyecto de Quique Sánchez Flores tan solo duró dos cursos. Y ni eso, ya que no acabó su segunda temporada como entrenador del equipo. “Me da una tristeza muy grande cuando lo veo”, en referencia al descenso perico, “porque el Espanyol tuvo una oportunidad única de cambiar la mentalidad para siempre respecto a lo que había pasado en los últimos años”, explicó el técnico madrileño a ‘Goal.com’.

Y esa oportunidad, según él, se dio cuando estaba en el banquillo blanquiazul. “Me dieron una hora en blanco, me dijeron ‘hay 24 jugadores, se quedarán y vendrán los que tú quieras’. Nos dieron 15 millones para fichar, que en 2016 era muy poco para lo que gastan los clubes, en un equipo que venía de estar luchando por el descenso los dos últimos años. Con 15 millones firmarmos a 11 jugadores entre cedidos, medio adquiridos, prestados, libres… Hicimos una plantilla de 25. Conseguimos 56 puntos, que tres años más tarde sigue siendo el récord de los últimos 15 años”, explicó Sánchez Flores, que continuó diciendo que el siguiente año les dieron el mismo presupuesto para acabar, en esta ocasión, entre los siete primeros.

“Pero cuando tenemos decidido qué cuatro o cinco jugadores queríamos y hablados con el club, nos dicen que no hay nada para invertir ese año. Que hay que recuperar la inversión, que no es posible”, señaló. “Dos años y 70 millones más tarde, resulta que están en la peor situación posible. Hoy hubieran firmado tener los 36 puntos que teníamos nosotros a falta de seis jornadas”, finalizó.