Quique Sánchez Flores: "Cambió el proyecto y el objetivo del club"

Repasó Quique Sánchez Flores, en ‘PericosOnline’, su paso por el Espanyol, banquillo en el que estuvo dos campañas (2016/17 y la siguiente), y explicó cómo, tras una primera buena temporada, la relación se fue deteriorando hasta su despido. “La primera temporada fue buena, estábamos muy ilusionados”, indicó el madrileño.

Pero tras antes de comenzar su segundo curso al frente del navío perico, todo se torció. “Hubo una reunión y el proyecto del segundo año era muy claro. El mismo presupuesto se repartiría entre cinco jugadores de nivel y no en once. Todos estábamos de acuerdo”, dijo, aunque en sus palabras eso no acabó cumpliéndose; el primer paso para el desentendimiento fue cuando al Espanyol se le escapó el fichaje de Diego Reyes.

“Cuando algo falla, es necesario que la gente lo sepa. Me hubiera gustado que se hubiese dicho públicamente que en el segundo año ya no íbamos a ser capaces de cumplir el proyecto. Cambió el proyecto y hubo una contención que no es buena. Pasa muchas veces que cuando consigues el objetivo el primer año y te olvidas del peligro que habías corrido, los proyectos cambian porque se acomodan”, explicó Quique Sánchez Flores, que a partir de ahí ve como se corta la relación con Chen Yangsheng. 

No entendió su despido

“Me parece que es algo normal que se dice en una sala de prensa. Pero luego el club se acogió a eso para hacer un despido disciplinario, lo cual, tras dos años de energía y dedicación, me parece bastante incomprensible”. Se refirió el técnico a su famoso “no damos para más” de Getafe, una jornada antes de su despido. A pesar de ello, no guarda rencor al Espanyol. “Volvería si se dan las condiciones, que son respetar la figura del entrenador y cumplir con el proyecto”, añadió Sánchez Flores.