El quinto descenso del Espanyol a los infiernos

Javi López: "Salgo aquí es para pedir disculpas a nuestra afición"

 Javi López habló tras el Barça - Espanyol / sport

Lucas Cadete

Se consumó la tragedia. El Espanyol ha descendido por quinta vez en su dilatada historia a Segunda división, ahora Liga SmartBank

Haciendo historia, la primera vez que el Espanyol abandonó la primera categoría de nuestro fútbol también fue en una dramática promoción frente al Real Valladolid. 1-0 en Sarrià, pero 2-0 adverso en Zorrilla e inolvidable, por nefasta, primavera de 1962 en ‘Can Ràbia’. Después llegaría una segunda caída a los infiernos en el año 1969. Mientras el hombre se preparaba para viajar a la luna, un club deshecho por el ‘caso Matesa’ se iba al pozo.

Inolvidable Sitjar

No le sentó bien al Espanyol la final perdida de Leverkusen. Ya en aquella misma campaña 87-88 se salvó del descenso pocos días después de la final de la UEFA con un sonrojante empate a cero ante el Logroñés que salvaba a unos y otros, “que se besen” en el viejo Sarrià. Pero doce meses después la deriva fue insalvable y el equipo regresaba a Segunda justo dos décadas después en una tarde negra en el Lluís Sitjar.

El equipo había deambulado por la Liga hasta verse de nuevo en la fatídica promoción de descenso ante el Mallorca. Los bermellones remontaron el 1-0 de la ida y con dos dianas de Nadal Vidal  firmaron su ‘vendetta’.

Y es que el Espanyol había ascendido a Primera tras su primera experiencia en la categoría de plata precisamente en una dramática promoción ante los isleños en 1963. El primero de los cuatro éxitos pericos en Segunda, presencias fugaces que ahora la masa social blanquiazul espera que se repita en la próxima campaña 2020-21.

Los ascensos ante el Mallorca en 1963, en una brillante campaña en 1970, en una legendaria tanda de penaltis en La Rosaleda con el gol de Albert Albesa para subir en 1990, y en la última fiesta del ascenso, el 4-0 al Cádiz el día de Sant Jordi de 1994, son los precedentes a los que se aferra el Espanyol, dispuesto ya a vivir su quinto 'añito' en el infierno.