El futuro de Darder es una incógnita

"No es momento de pensar en ello, es momento de desconectar y limpiar cabeza. Ser muy autocríticos, empezando por los de arriba", dijo el capitán

Darder aseguró que "todo el mundo sabe que es mi casa, ha sido una temporada muy dura". E insistió: "Ahora toca desconectar y no tomar decisiones en caliente"

Rayo Vallecano - Espanyol | El gol de Sergi Darder

Rayo Vallecano - Espanyol | El gol de Sergi Darder / LaLiga

Roger Payró

Pese a todo, el pasado domingo fue un día de comunión en el espanyolismo. Los pocos que asistieron al partido contra el Almería, 14.213 personas concretamente, se congregaron para despedir una temporada negra. Las protestas contra los arbitrajes recibidos eclipsaron un encuentro que no dejó de ser un fiel reflejo de lo que ha sido todo el año. Lo dijo el propio Sergi Darder, a quien la afición le suplicó que se quedara aunque por ahora él no tiene nada claro. 

“Cuando te meten tantos goles es complicado”, lamentaba el capitán. Con 52 goles a favor el Espanyol ha sido el séptimo equipo más prolífero, aunque los 69 en contra, más incluso que el colista Elche, han supuesto una losa terrible. Pero lo hecho, hecho está. Desde ya el club debe trabajar en diseñar el nuevo proyecto en Segunda División, aunque faltan muchas piezas por definir. Entre ellas Darder. 

“Siempre estaré agradecido a este club, es mi club y se lo debo todo a ellos. No es momento de pensar en ello (su futuro), es momento de desconectar y limpiar cabeza, ser muy autocríticos empezando por los de arriba y sobre todo los jugadores que somos los que estamos en el campo. A partir de aquí nos queda un tiempo de desconexión muy necesario”, valoró el ‘10’ blanquiazul en unas palabras que no garantizan su continuidad en el equipo. 

Darder se ha ganado el derecho a decidir dónde jugará la próxima temporada. Aunque ya pesan dos descensos sobre sus espaldas, el mago de Artà es la prolongación de la grada en el verde. Puro sentimiento. Y de calidad va sobrado. “Sergi quédate” le corearon los espectadores cuando fue sustituido el domingo. 

Tiene contrato hasta 2026 pero habrá que esperar unas semanas para resolver la incógnita. “Todos necesitamos limpiar la cabeza. Todo el mundo sabe que es mi casa, ha sido una temporada muy dura, ahora toca desconectar y no tomar decisiones en caliente. Mi corazón es del Espanyol, pero es momento de desconectar”, añadió. Nadie le presionará. Sólo él puede decidir si quiere liderar un nuevo renacer blanquiazul en la categoría de plata o si acepta alguna de las varias propuestas que no le faltarán en la élite.