El Espanyol necesita la victoria ante el Villarreal

El Espanyol necesita reencontrarse con la victoria en el estadio de Cornellà/El Prat para alejarse de la zona de descenso y evitar problemas inesperados en un futuro inmediato. Enfrente tendrá a un Villarreal, en puestos europeos, pero que atraviesa su peor momento de la temporada.

El equipo de Quique Sánchez Flores no gana en su estadio desde el pasado 22 de diciembre (1-0 al Atlético). Ya toca acabar con la negativa racha. Los blanquiazules llegan a la cita tras dos empates consecutivos ante rivales muy complicados (Barcelona y Celta), pero dejando una imagen lamentable en Balaídos que resta méritos al punto sumado.

El Espanyol, por tanto, está obligado a vencer y recuperar sensaciones en su juego. Las alarmas no se han encendido, pero está solo a ocho puntos del descenso y no puede permitirse muchos más lujos ni despistes para no verse sorprendido en la fase decisiva de la competición y vivir un preocupante final de tempoarada.   

El Villarreal visita Cornellà/El Prat en su peor momento. Pese a mantenerse en posiciones europeas, acumula tres derrotas consecutivas incluyendo el choque de la Europa League y ha dejado escapar la diferencia que acumulaba en la lucha europea. El desgaste en Francia fue grande y eso obligará a Javi Calleja a rotar jugadores que acumulan ya muchos minutos.

Todo lo contrario que Quique. El preparador espanyolista tiene a todos los jugadores disponibles y probablemente hará algún cambio en busca de mejorar el juego. En defensa podría regresar Javi López, mientras que en el centro del campo parece que apostará por un doble pivote formado por ‘La Roca’ Sánchez y Sergi Darder. Músculo y creatividad; junto a Jurado y Granero en las bandas. Calidad habrá en el campo para, a priori, generar más juego durante el encuentro.

La novedad más destacada, no obstante, podría ser la titularidad de Sergio García en ataque en lugar de Leo Baptistao. El brasileño fue uno de los autores de los goles en Balaídos, pero la presencia del delantero de Bon Pastor está en la mente del técnico, que necesita tener más presencia ofensiva en el estadio. Gerard Moreno es intocable en este equipo. Es el 'killer' y el 'alma mater'.