Al Espanyol se le escapa la primera a domicilio

Al conjunto blanquiazul no pasa del empate a dos y se queda a las puertas de lograr los primeros tres puntos como visitante

Vicente Moreno agitó el duelo tras el receso y el equipo remontó el partido en dos minutos mágicos

Melendo, lamentándose en una acción del partido

Melendo, lamentándose en una acción del partido / EFE

Francesc Ripoll

Se va insatisfecho el Espanyol del Martínez Valero. En un partido de auténtica locura, sobretodo el segundo tiempo, los blanzquiazules dejaron escapar el primer triunfo a domicilio de la temporada después de remontar el tanto local tras el receso. Los cambios de Vicente Moreno le cambiaron la cara a un equipo que, pese a no vencer, acumulan ya tres fechas sin perder.

Elche - Espanyol 23/10

LaLiga Santander

2
2
Alineaciones
Elche
Casilla; Barragán (Palacios, 83'), Verdú, Bigas, Mojica; Mascarell (Tete Morente, 63'), Guti (Pere Milla, 83'); Lucas Pérez (Gumbau, 63'), Pastore (Benedetto, 64'), Fidel; Lucas Boyé.
Espanyol
Diego López; Óscar Gil (Fran Mérida, 82'), Sergi Gómez, Cabrera, Pedrosa; Embarba, David López (Morlanes, 46'), Darder (Yangel Herrera, 67'), Melendo (Aleix Vidal, 75'); Wu Lei (Melamed, 46'), De Tomás.

Vicente Moreno ya ha demostrado a lo largo de su trayectoria como técnico blanzquiazul que si algo va bien, mejor no tocarlo. Prueba de ello es el once que sacó en el Martínez Valero, con un único cambio respecto al que venció al Cádiz el pasado lunes. Sentó a Loren Morón y Wu Lei fue el que salió de inicio, jugando por la izquierda. Embarba ocupaba el carril derecho y Melendo hacía la función de enganche, por detrás de RDT.

Quizás por el buen momento que atraviesa el Espanyol, quizá por el hecho de tener a 650 pericos presentes en Elche en el primer gran desplazamiento post-pandemia, o quizás por un cúmulo de ambas cosas, pero los de Moreno salieron espoleados al verde. 11 segundos tardó De Tomás en cargar su pierna y disparar. Lo volvió a hacer tres minutos después. Y acto seguido le copió Pedrosa. Los jugadores tenían el gol entre ceja y ceja y pronto se encargaron de demostrarlo.

Ese ímpetu inicial se fue diluyendo con el paso de los minutos. El Elche hizo un paso al frente y empezó a dominar el balón. Poco a poco, el Espanyol empezó a recular y Fidel fue el primero en ver puerta, picando el cuero por encima de Diego López. El ilicitano, eso sí, estaba en posición antirreglamentaria y el árbitro anuló el tanto. No le hizo lo mismo a Lucas Boyé, cuando le birló la cartera a un despistado David López y fusiló a Diego López con un potente derechazo.

Un gol que le sentó como una losa a los blanzquiazules. Se encontraron agazapados en su campo y espesísimos en ataque, con un RDT errático y un Darder, el faro del centro del campo este curso, totalmente desaparecido. Y eso el equipo lo nota. Viendo el panorama, Vicente Moreno no dudó en mover el banquillo tras el receso. Dejó a Wu Lei y David López en los vestuarios para dar entrada a Melamed y Morlanes.

Dio con la tecla el de Masanasa, porque los cambios surgieron efecto inmediato. A los cinco minutos de pisar el verde, Morlanes arreó un zapatazo desde la frontal imposible para Kiko Casilla que servía para empatar. Pero eso no quedaría así. Porque en la siguiente jugada, el Espanyol confirmó su reacción. Afiló su puñal Pedrosa con una carrera por la izquierda y mandó un centro que RDT, de primeras, convirtió en oro. Primer gol del madrileño fuera de casa esta temporada.

No levantó el pie del acelerador el conjunto blanzquiazul, que tuvo más de una ocasión para poner el sello al encuentro. Debutó también Yangel Herrera, que disputó sus primeros minutos con el Espanyol. Pero las malas noticias se sucedieron en los últimos minutos. Se tuvieron que retirar lesionados Melendo y Óscar Gil y, cuando daba la sensación de que el Elche no sabía como generar peligro, llegó el empate. Benedetto se encontró con un rebote dentro del área e igualó la contienda. Se quedó con la miel en los labios el Espanyol, que se salvó en la última jugada gracias a una buena intervención de Diego López.