Ultimátum del Espanyol a Rubi

Rubi podría abandonar el Espanyol

Rubi podría abandonar el Espanyol / CARLOS MIRA

SPORT.es

Estupefacción y sorpresa en las oficinas del RCDE Stadium. También entre la afición. Pocas fechas después de clasificar al Espanyol para Europa, Joan Francesc Ferrer ‘Rubi’ puede hacer las maletas. Los agentes del técnico se reunieron con el Betis en Sevilla a espaldas del club perico para negociar su llegada a Heliópolis. La entidad verdiblanca ofrece al entrenador de Vilassar de Mar un contrato de tres campañas a razón de dos millones de euros por temporada, con la posibilidad de rescindir unilateralmente el contrato por parte de cualquiera de las dos partes al termino del curso. Unas cifras que mejoran ostensiblemente lo que percibe en el Espanyol.

Tras la salida de Quique Setién del Betis, el club andaluz ha peinado el mercado en busca de una opción continuista. Abelardo o Cocu han sido los dos nombres que más cerca han estado del banquillo bético, pero no han cuajado. Los vicepresidentes del club, Lorenzo Serra Ferrer y un José Miguel López Catalán  que cuenta con el respaldo del máximo mandatario verdiblanco, Ángel Haro, no llegaban a un entente. La figura de Rubi ha logrado ponerlos de acuerdo. Es el entrenador escogido para comandar el barco bético el próximo curso.

El Betis sabe que deberá rascarse el bolsillo para sacar a Rubi del Espanyol. El preparador tiene contrato con el club perico hasta 2020 y cualquier equipo que lo quiera deberá rascarse el bolsillo, aunque la cantidad compensatoria es inferior al millón de euros. La cláusula de rescisión fijada en el contrato con el preparador catalán se fija a partir de un porcentaje de su salarial anual; porcentaje que varia a partir del próximo 1 de julio.

De todos modos, la entidad blanquiazul no se ha quedado de brazos cruzados y ha aumentado la mejora de contrato que le propuso a Rubi el pasado ocho de mayo; le ha dado 24 horas para responder y tomar una decisión. Una propuesta inferior a los dos millones que le ofrecen en el Betis.

Imagen dañada

El hecho de haberse sentado a negociar con el Betis, además de sorprender a propios y extraños después del logro conseguido con el Espanyol, ha hecho mucho daño a la imagen de Rubi. La afición se siente decepcionada con el técnico y, si finalmente acaba quedándose, no lo verá con los mismos ojos. También está por ver la reacción del vestuario blanquiazul, siempre fiel al de Vilassar de Mar y al que ha apoyado desde el primer minuto.

Ante esta situación, es practicamente imposible no pensar en la figura de Quique Sánchez Flores, que a mediados del pasado curso negoció su fichaje por el Stoke City. La gran diferencia es que por aquel entonces fue en plena campaña, así como que la relación del técnico madrileño con el vestuario no era la mejor. 

Opciones para el banquillo

El deseo en el Espanyol es que Rubi sea el entrenador del equipo la próxima campaña, pero ya se prepara por si su actual técnico decide cambiar el Mediterráneo por el Guadalquivir.  Oscar Perarnau y Rufete, que se han encontrado con un importante fuego inesperado, ya han tanteado el mercado. El elegido, el que más gusta, es  Pablo Machín, que vería con buenos ojos recalar en el banquillo perico. El soriano firmó el pasado verano por el Sevilla tras presentarse en la élite con el Girona, pero fue destituido el pasado mes de marzo.

Otra opción sería la de David Gallego que está avalada por la propiedad. Es un entrenador que encantada a Mr. Chen. Gallego tiene una oferta del Tenerife y, por tanto, no debe descartarse que finalmente también deje el club si no es el designado para acceder al banquillo del primer equipo.