Los penaltis conducen al Espanyol a los octavos de Copa

El Espanyol eliminó a la Ponferradina en la tercera ronda de la Copa del Rey. El equipo blanquiazul se las prometía felices con el gol tempranero de Pedrosa pero no cerró el encuentro y Yuri, con un penalti que no debió haber existido por fuera de juego, mandó el duelo a la prórroga. Ahí el equipo local no dio la tallada. Diego López detuvo dos lanzamientos y otro fallo permitió a los catalanes, intachables, ganar la tanda (1-3).

La convocatoria era un aviso a navegantes y el once lo confirmó. Vicente Moreno puso toda la carne en el asador en El Toralín, a sabiendas de que la Ponferradina daba un salto cualitativo respecto al Solares y al Cristo Atlético. Sufrió más de lo debido el Espanyol en las anteriores rondas con la unidad B y el técnico no se la quiso jugar en El Bierzo. Pronto los suyos le respondieron sobre el verde. Darder no colocó bien el cuerpo en la primera llegada y definió mal, todo lo contrario que Pedrosa. El lateral estaba percutiendo por su costado y en una combinación con De Tomás consiguió batir a Sergi Puig por el palo corto. Los toques de Iván Rodríguez en el pase y de Pascanu en la definición, claves para complicar la vida a la Deportiva.

Poco a poco los de Bolo se desperezaron para empezar a discutir la posesión del cuero a los blanquiazules –hoy de rojo-, si bien no encontraron el camino al área de Diego López. Un libre directo desde la media luna de Cristian Rodríguez que pegó en la barrera fue la mejor ocasión. Melamed, tras una gran acción de calidad, ensució las manoplas de Sergi Puig en la última antes del receso. La joven perla perica, escorada en banda en el 4-4-2 que diseñó Moreno, fue cambiado en el asueto por Embarba.

Mejoró sus prestaciones la Ponferradina en la segunda mitad ante un Espanyol que cerraba espacios por dentro y obligaba a disparos lejanos como el de Cristian Rodríguez. A la hora de juego, en la primera jugada que pudieron trenzar, Diego López achicó perfecto ante Naranjo. El ex del Nàstic, entre otros, era el que más peligro aportaba junto con Ojeda, que tuvo que sustituir a Enrich en la primera mitad tras un lance con Diego.

Sufría Aleix en defensa y Moreno no se lo pensó en dar entrada a Óscar Gil. El dominio era berciano aunque De Tomás, que pasó de puntillas en su primer partido copero del curso, la tuvo en una contra que salvó una mano firme de Puig. Jugaba con fuego el Espanyol y acabó por quemarse en el 88’. Sergi Gómez cometió penalti sobre Yuri y el mito de la Deportiva batió a Diego desde los once pasos. La jugada, eso sí, debió ser anulada por fuera de juego. Con VAR no hay paraíso, pero sin él menos. Dimata, que había entrado con Jofre, vio como Yuri sacó bajo palos su testarazo en el descuento. A la prórroga.

El belga, que marcó un doblete en Segunda en El Toralín, reactivó el ataque de los de Moreno en el ‘extra time’. Remató hasta dos veces más y la segunda se fue lamiendo el palo. La primera parte de la prórroga fue claramente de los catalanes pero el esfuerzo hizo mella en la segunda. Jofre y Wu Lei las tuvieron, pero todo se decidió en unos penaltis que les sonrieron.