Así vivió las elecciones Toni Freixa: disfrutó de la jornada sin obsesionarse con el resultado

En los procesos electorales, Toni Freixa se mueve como pez en el agua. Le gustan, se lo pasa muy bien. Y se nota. Es una de esas personas que gozan del camino sin obsesionarse con el destino; aunque, evidentemente, en el día decisivo es cuando se divierte más.

Este domingo, Freixa se levantó temprano como es habitual. Antes de pasar el test de antígenos, se reunió con algunos miembros de su candidatura, ‘Fidels al Barça’, en el Bar Bayo, ubicado en Travessera de les Corts. Hizo piña con su equipo antes de que se abrieran las puertas de las seis sedes electorales y, posteriormente, se encontró con los familiares más cercanos en el box del Camp Nou que el club le habilitó. Le apoyaron su mujer y sus hijos.

Fue el segundo candidato en ejercer su derecho a voto. Lo hizo entre Laporta y Font, a las once menos cuarto, cuando ya no había rastro del chaparrón que inauguró la jornada e incluso el sol se dejaba ver en algunos momentos puntuales. Después de sufragar, dio vueltas por el perímetro permitido y se fotografió con todos los socios que se le acercaron. Coincidió con algunos conocidos suyos, entre los que destacó Amador Bernabeu, y con los dos otros aspirantes al trono.

Barcelonismo incuestionable

Comió en su sede electoral, muy cerca del estadio azulgrana, y después regresó al mismo para ver la primera parte del derbi entre el Atlético y el Madrid desde su carpa. Por la tarde se añadió a su expedición Lluís Carreras, director de fútbol de su proyecto. Continuó dando vueltas al recinto y atendiendo a los aficionados hasta que se cerraron las mesas. Siguió el escrutinio al lado de las personas de su confianza.

Con un ojo en el derbi madrileño

Durante la campaña electoral, sobre todo en los debates, una de las cuestiones que ha repetido más Toni Freixa es que la ‘F’ de FCBarcelona significa “fútbol”. Ayer el equipo azulgrana se jugaba mucho en el derbi madrileño y él no se quiso perder la primera parte del encuentro que permitió a los de Koeman acabar la jornada a tres puntos del liderato. Después de los 45 minutos iniciales, sin embargo, el candidato decidió volver a pasearse por los aledaños del Camp Nou para continuar haciendo lo que más le gusta: hablar del Barça.