Llegó el gran día: Laporta, Font o Freixa

Bienvenidos al “Templo” azulgrana . ¿Cómo? Sí, en los últimos tiempos algunos barcelonistas están llamando así al Camp Nou. El Templo. 

La larga sesión de fotos matinal (dos horas para satisfacer las necesidades periodísticas de cuatro medios de comunicación) empezó con cierto retraso. Laporta, siendo fiel a su fama, llegó veinte minutos después de la hora convenida. Y Freixa, de buen rollo, le espetó cuando le vio entrar: “¡Jan, cómprate un reloj!”. Risas. Menos mal. Vamos bien.

“Cada vez que entro aquí se me pone “gallina de piel”, comenta el ex presidente Laporta parafraseando al gran Johan Cruyff. Y no será que no lo haya pisado veces Joan Laporta. Como Víctor Font y Toni Freixa.

Freixa se ‘viste de corto’ para recordar el olor de la hierba recién cortada. Y echa la mirada atrás: “Tuve la suerte de jugar seis finales del torneo de socios en el Camp Nou y la sensación de correr por el césped es maravillosa”.

También tiene en el disco duro de su memoria la fecha de su primer partido visto en el Camp Nou: “Fue en marzo de 1974, cuando le metimos cinco goles al Castellón”.

Fotos en Gol Sur, la lado de Travesera. Después en el Gol Norte. Hace calor y solo Font se ha presentado más fresco. Sin corbata.

Es la hora de dar unos toques al balón. Ayyyy... Todos han perdido práctica. La excusa son los zapatos. Bueno, no lo hacen nada mal dadas las circunstancias.

Los tres han sido y son ‘futboleros’. Freixa jugó en la Peña Barcelonista Anguera y en el Mollet. Laporta en la Peña Barcelonista Cinc Copes y en el Sant Andreu, donde compartió equipo con Sandro Rosell en el amateur. ¡Vaya con el destino! ¡Los dos presidentes del FC Barcelona después!

Font estuvo defendiendo la camiseta de su Granollers natal hasta edad juvenil. Un asesor nos silba al oído que “era un central de los antiguos, alto y fino estilista. No daba palos”. Bueno, bueno, eso habría que haberlo visto..

Más fotos, esta vez cerca del túnel por donde salen los jugadores. “Todos soñamos de niño jugar un día en el Barça”, dice Víctor Font, que recuerda la ‘foto’ de un partido jugado en el ya desaparecido Mini Estadi compartiendo foto con Laporta, ¡Bartomeu con gafas! Soriano y Marc Ingla. 

Nos vamos a la tercera gradería del Templo. Menos mal que hay ascensor. Todo el estadio a nuestros pies. Impresionante. Quieren una foto de recuerdo. Y Freixa saca su móvil. Un selfie. Risas. Laporta saca el suyo. Más risas.

Han pasado ya dos horas. Una última foto tocando el balón delante de una de las bocas. ¿Otra foto? Sí, con la antigua residencia de jugadores de La Masia detrás. “Ahí empezó todo”, coinciden los tres.

Buen rollo

Nosotros somos la punta del iceberg”, dice Víctor Font para dar valor al equipo de trabajo que lleva acompañándole todos estos años. Se ha presentado con él su mano derecha, Albert Roura, que fue cocinero antes que fraile. Es decir, director de comunicación del FC Barcelona con Josep Maria Bartomeu de presidente. Conoce las entrañas del club. Vamos, que podría escribir un libro.

Y ya que hablamos de ese departamento de comunicación, un fuerte aplauso para todo el equipo del club que está bajo las órdenes de Toni Ruiz y José Manuel Lázaro. Entre otos, Ricard Franco, Sandra Sarmiento, Xavi Catalán... Todos estuvieron presentes durante el reportaje para que saliera a la perfección. ¡Gracias, chicos!

Laporta y Freixa, como Font, también se presentan con sus colaboradores más estrechos. El de Toni estuvo toda su vida en las ‘trincheras’ del periodismo. Ahora se ha pasado al otro lado. Y el Laporta lleva a su lado desde que entró en política municipal después de dejar la presidencia del FC Barcelona en 2010. Ha sido una de las personas con las que ha estado estudiando al detalle el nuevo asalto a la presidencia. A Laporta también le acompaña su jefe de campaña, Lluis Carrasco, el publicista que tuvo la brillante idea de colocar la famosa pancarta gigante en una de las calles de Madrid.

Quedan pocas horas para el debate de TV3. El último. Un asesor dice que puede ser decisivo si su ‘cliente’ convence a los indecisos. Otro, que nada, que no cambiará el destino: “Todo el pescado ya está vendido”.

Se despiden unos de otros. Más allá de los rifirrafes verbales y fuego cruzado de acusaciones (“es lo que toca en campaña electoral”, afirma un asesor) impera el juego limpio. Se nota que se profesan afecto personal. Una gran ‘fotografía’ para despedirnos.