Resultados de 2022

El BBVA eleva su beneficio el 39% hasta el máximo de su historia: 6.420 millones

El banco sube su dividendo un 39%, recomprará acciones por 422 millones y deja la puerta abierta a nuevos pagos extraordinarios | Torres Vila, al Gobierno: "Abandonar la iniciativa privada y empresarial por otro tipo de modelos tiene resultados catastróficos"

El presidente de la Fundación BBVA, Carlos Torres .

El presidente de la Fundación BBVA, Carlos Torres . / EP

Pablo Allendesalazar

El 

BBVA 

ganó 6.420 millones de euros el año pasado, un 38% más que en 2021 y la cantidad más elevada desde su fundación en 1857, gracias a la mejora de ingresos por el alza de tipos y el aumento del crédito. El banco destinará 3.015 millones de estas ganancias a remunerar al accionista (el 47% del total, en la parte alta de su objetivo de repartir entre el 40% y el 50%). Así, abonará un nuevo dividendo en efectivo de 0,31 euros por acción en abril, que sumados a los 0,12 euros de octubre elevan el pago total a 0,43 euros, un 39% más y la cantidad más alta en 14 años.

Además, el grupo podrá en marcha un nuevo plan de recompra de acciones de 422 millones y ha dejado la puerta abierta a hacer algún pago extraordinario adicional a los accionistas antes del final de 2024, incluso este mismo año. Los inversores, que están premiando a los bancos que aumentan la retribución a los propietarios, lo han celebrado con una subida en bolsa de su acción del 4,7%.

La reacción del Gobierno ha sido bien distinta. La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha afirmado que "la crisis no puede ser una excusa para ganar más" y ha exigido a la banca "congelar hipotecas, moderar beneficios". Y la ministra de Industria, Reyes Maroto, ha asegurado que los resultados récord hacen que se "entienda mejor" por qué el Ejecutivo ha impulsado un 'impuesto' extraordinario al sector.

Defensa empresarial

El presidente del BBVA, Carlos Torres Vila, ha dedicado buena parte de la presentación de resultados a contrarrestar este tipo de acusaciones. Así, ha señalado que el crecimiento del beneficio se puede "malinterpretar", ya que el banco todavía no obtiene en España la rentabilidad que le exigen los inversores, un nivel que es necesario alcanzar pues "lo peor que le podría pasar" al país es no lograr atraer capital. Asimismo, ha destacado que el crecimiento de las ganancias viene sobre todo del negocio internacional y ha recordado que la filial española tuvo varios años de pérdidas en la última década en un entorno de tipos de interés negativos. El 'impuesto', ha insistido, tendrá "repercusiones negativas sobre la economía" porque perjudicará al crédito y el banco no descarta recurrirlo.

En términos más generales, el banquero ha hecho una defensa del papel de las empresas en las economías de mercado y ha asegurado que los intereses de las compañías "coinciden" con los de la sociedad. "La historia está repleta de ejemplo de economías y sociedades que abandonaron la iniciativa privada y empresarial por otro tipo de modelos con resultados catastróficos", ha advertido antes de mantener que "lejos de estar de acuerdo con las críticas a empresarios que hacen cosas encomiables, al revés, deberíamos verlos todos en positivo".

El ejecutivo, por otra parte, se ha negado un año más a responder preguntar sobre el 'caso Villarejo', por el que el banco está investigado en la Audiencia Nacional. Por su lado, el consejero delegado, Onur Genç, ha descartado que la entidad vaya a pagar de forma generalizada a los hogares por los depósitos y también ha pronosticado que los impagos en las hipotecas no serán relevantes pese al alza de tipos.

México, en cabeza

Excluyendo los impactos no recurrentes (-201 millones este ejercicio por la recompra de oficinas a Merlin y -416 millones en 2021 por el coste de la reestructuración de plantilla en España, parcialmente compensada por la aportación de la filial estadounidense hasta su venta), el resultado hubiera sido de 6.621 millones, un 30,6% más. En España, el banco ganó 1.678 millones, un 8,4% más y el más alto en 12 años. Según sus cálculos, el nuevo 'impuesto' al sector le costará 225 millones este año. En cualquier caso, México, con 4.182 millones, un 63,9% más, sigue siendo el principal motor del resultado.

Turquía, por su parte, aportó 509 millones, un 31% menos, por la fuerte caída de la lira y la contabilidad hiperinflacionaria (IPC del 64,3% en diciembre) que tuvo que empezar a aplicar a su filial Garanti (sin ella, hubiera ganado unos 2.000 millones). Se trata de apenas un 7,9% del resultado total, un nivel muy inferior al 13,8% de peso de la filial en el patrimonio contable del grupo. El grupo, así, sufrió en el país una pérdida contable de la posición monetaria neta por un importe bruto de 2.323 millones de euros, compensada parcialmente con el impacto positivo de los ingresos derivados de los bonos ligados a la inflación de 1.490 millones. Además, dicha pérdida no es deducible fiscalmente, lo que ha elevado notablemente el pago del impuesto de sociedades en el conjunto del banco (un 56,9%, frente a un alza del resultado antes de impuestos del 27,3%).

Más ingresos

La mejora del resultado del banco fue fruto de la subida de los ingresos básicos (30,4%, gracias al aumento del crédito y el alza de los tipos) y las comisiones (12,3%). En sentido negativo, el banco registró un impacto de 1.555 millones debido principalmente al ajuste negativo por hiperinflación de Argentina y Turquía y a la mayor contribución al Fondo Único de Resolución europeo. Los gastos del grupo (15,5%) crecieron menos que los ingresos totales (18,2%) pese al entorno inflacionista (19,1% de IPC medio registrado en todo los países donde opera el banco). 

Ello permitió que el margen neto subiese un 22,5%, lo que sumado a un menor crecimiento de las provisiones para afrontar pérdidas y devaluaciones de activos (11,4%, en línea con el aumento del crédito) dio lugar a una mejora del resultado antes de impuestos del 27,3%. El mayor pago del impuesto de sociedades (56,9%) se vio contrarrestado por la menor atribución de resultado a accionistas minoritarios (tras la opa en la filial de Turquía y la menor aportación de esta división), lo que explicó el alza final del 38%.

La tasa de mora del grupo bajó del 4,1% al 3,4%. La rentabilidad sobre el capital del grupo mejoró del 10,4% al 14,1%, en línea con la que le exigen los inversores. El capital descendió ligeramente, del 12,75% al 12,61%, pero sigue por encima del objetivo del banco (11,5-12%). La entidad tienen hoy por hoy un exceso de capital sobre su objetivo de unos 2.700 millones, que es el que estudia repartir a sus accionistas de forma extraordinaria hasta finales de 2024, ya que a partir de entonces quiere operar dentro de su rango objetivo.