Laia Sanz intenta sobrevivir al Dakar más duro

Laia Sanz

Laia Sanz, en acción durante el Dakar 2018 / afp

Laura López Albiac

Laura López Albiac

Laia Sanz está a solo dos días de completar su octavo Dakar y también de cumplir el objetivo  - 'top 15' -, que se marcó en la salida.  De momento ocupa una meritoria decimotercera posición en la general absoluta de motos. Sin embargo, la piloto de KTM está sufriendo mucho en este tramo final del rally y tampoco ella se libra de la dureza extrema de esta 40ª edición, que se ha cobrado ya muchas 'víctimas' entre los grandes favoritos.

La cancelación de la duodécima etapa le vino bien a Laia para coger aire y recuperarse de la fuerte caída que sufrió durante la undécima, entre Belén y Chilecito, a falta de 20 kilómetros de meta y que fue su segundo incidente consecutivo en dos jornadas. Antes de abordar este viernes el penúltimo día en el Dakar 2018, la piloto de Corbera mostraba su fatiga en las redes sociales, aunque también se mostraba convencida de poder acabar la carrera, algo que en sus siete ediciones disputadas hasta la fecha, siempre ha conseguido.

Las caídas de los dos últimos días le han dejado espalda y cuello doloridos y una mano inflamada. Laia reconoce que en la 11ª etapa lo pasó realmente mal: "No fue un día fácil. Me tocó salir detrás de coches y camiones. Estaba muy peligroso. Comí polvo de un camión durante un buen rato y me la jugué mucho para adelantarlo", recuerda.

Su único objetivo ahora mismo es "intentar salvar las dos etapas que quedan para acabar entera" el rally y llegar a la meta de Córdoba, este sábado en la mejor posición posible. Le separan 2h.34:30 del líder, su compañero Matthias Walkner, pero queda por ver como libra hoy Laia su batalla en las dunas de San Juan.

Autora de un histórico noveno puesto en el Dakar 2015 y decimosexta el año pasado, Laia considera que "El resultado es siempre importante, pero acabar satisfecha es lo que creo que es lo principal".