Cine

Paula Ortiz (nominada a los Goya por 'La virgen roja'): "Entiendo el juego, pero las películas no compiten ni pueden competir"

La cineasta llega a la gala de los Goya en Granada con un filme que cuenta con nueve nominaciones, entre ellas la de dirección

La aragonesa Paula Ortiz en el preestreno de ‘La virgen roja’ en los cines Palafox de Zaragoza.

La aragonesa Paula Ortiz en el preestreno de ‘La virgen roja’ en los cines Palafox de Zaragoza. / MIGUEL ÁNGEL GRACIA

Daniel Monserrat

Zaragoza

No es algo nuevo para la aragonesa Paula Ortiz ya que ya ha vivido dos galas de los Goya nominada con dos de sus filmes ('De tu ventana a la mía' y 'La novia') y, por eso, tiene claro que su trabajo con 'La virgen roja' ya está hecho "Nuestra responsabilidad es hacer la mejor película posible y esa película se hizo ya y la soltamos ya. De hecho, cuando estás con la promoción o si tienes la suerte de estar en los premios, en realidad tu cabeza está en la siguiente película y tu lucha ya está en la siguiente. Y para eso sirven, además". 

La cineasta ha visto cómo su película está nominada en nueve categorías (incluida la codiciada de dirección) y, aunque se niega a hacer quiniela, sí tiene claro los Goya que más ilusión le harían: "Por el equipo que ha habido y por la forma, el oficio y el compromiso de verdad con el cine y con la belleza y la transformación posible desde el cine, me haría mucha ilusión que se lo llevaran los equipos técnicos", afirma con seguridad antes de explicar que ella, en esta ocasión, no ha querido pronosticar nada: "Entiendo el juego y el 'fair play', pero es que considero y necesito considerar que las películas no compiten ni pueden competir", insiste como reflexión principal.

Un proceso de conmoción

¿Cuál cree que son las fortalezas de 'La virgen roja' por las que opta a 'nueve cabezones'? "Creo que es una historia que es un rincón muy oscuro y oscurecido de nuestra historia reciente. Es una historia que cada vez que yo la he contado y cada vez que alguien la escucha produce un proceso de conmoción". Y fue, a partir de ahí, cuando se trabajó mucho para construir una película con "valores cinematográficos, luchamos mucho para ello", señala Paula Ortiz, que prosigue: "Fue un reto afrontar una puesta en escena nueva, un lenguaje nuevo, una película que fuese comprensible para una audiencia pero también para una ciudadanía, porque es una película que habla de debates éticos y de debates ideológicos y que tenía que ser comprensible para la audiencia y la ciudadanía de hoy. Creo, además, que en los retos técnicos ha habido un equipo especialmente responsable, comprometido, con imaginación fuerte, con un compromiso con la dignidad, lo que se contaba y con la belleza", alaba la cineasta.

Sería jugar a ciencia ficción pero qué pensarían Hildegart y su madre sobre la alfombra roja: "Aurora le diría a Hildegart antes de entrar en la alfombra roja, ‘en las entrevistas sé impecable con la palabra y comprométete con tu inteligencia’, cosa que me parece importante. Creo que le diría eso. Y luego con el circo del brilli brilli, le diría lo que le dice en la escena del tenis en la película, ‘no estamos aquí por el juicio externo’, lo cual es muy importante también", reflexiona en voz alta Paula Ortiz.

Mucho tiempo de camino compartido

Sobre el gran momento que está pasando el cine realizado por aragoneses, la directora cree que nada es casualidad: "Javi (Macipe), Pilar (Palomero) y yo y más gente, llevamos mucho tiempo compartiendo camino. Pilar y yo nos conocemos desde hace más de 20 años. Llevamos compartiendo camino. Y es muy bonito. Pero es verdad que todo esto nos tiene que recordar que responde a muchos años de preparación y muchos años de formación y de intentar proyectos que tardan mucho en fraguar y que ahora se están desplegando y están floreciendo. Ahora lo ve la gente, pero este momento responde a muchos años de trabajo", afirma antes de hablar del ADN de la comunidad: "Creo que nuestra resistencia interna y externa, física, mental, ética, es muy importante para hacer cine. Por eso hay tantos directores, por eso la historia del cine tiene tantos aragoneses para ser una comunidad tan pequeña", reivindica.

El gran día del cine español se celebrará este sábado en Granada, una cita que es imprescindible para la industria audiovisual del país: "Claro, los premios ya es algo muy dislocado, muy separado de tu trabajo, pero realmente son importantes porque son el momento de visibilidad y de brillo. El cine, como bien saben los americanos es la fábrica de sueños. Y en los sueños está la fábrica de estrellas y estas hay que colocarlas en un lugar para que brillen. Y cuando hablo de estrellas no hablo de actores, hablo de que las películas, las historias, son ese pedacito celeste o ese pedacito astral que se proyecta. Otros mundos y otros universos son posibles ahí".