Universidad Católica vence en el último minuto a Rosario Central

La Universidad Católica de Chile derrotó este miércoles al Rosario Central argentino en la segunda jornada de la Copa Libertadores en un duelo con un final de infarto que decidió un gol de penalti del argentino Luciano Aued en el minuto 95.

Tres minutos antes, el colombiano Duván Vergara había logrado el tanto del empate para el cuadro argentino, un resultado que parecía definitivo pero que se rompió con el penalti que provocó el impetuoso José Pedro Fuenzalida.

Edson Puch adelantó a la UC

El atacante Edson Puch anotó el primer gol para los chilenos. Con este resultado, la U Católica obtiene su primer triunfo en el grupo H, que lidera el Libertad paraguayo con seis puntos.

La UC dominó el primer tiempo y logró imponer su ritmo sin grandes alardes ni un fútbol extraordinario ante un rival poco punzante que no inquietó al arquero Matías Dituro.

El cuadro argentino no generaba peligro en ataque pero conseguía replegarse con efectividad, lo que dificultó a los locales crear buenas oportunidades de gol.

La más clara para la Universidad Católica fue un cabezazo del delantero argentino Sebastián Sáez que Jeremías Ledesma despejó con la punta de los dedos a los diez minutos de juego.

A los chilenos les costaba elaborar jugadas para acercarse al arco rival y finalmente hallaron una solución poco ortodoxa pero efectiva a casi media hora del inicio del choque.

El meta Dituro puso un balón largo que desvió un zaguero de los 'canallas' para habilitar a Puch, que encaró al guardameta argentino y lo superó con un disparo raso con la punta del pie.

En el inicio de la segunda parte Sáez estuvo nuevamente cerca del gol, otra vez de cabeza, pero Ledesma lo volvió a evitar con una atajada.

El Rosario Central tuvo más posesión de balón en la reanudación pero no pudo traducir ese control en ocasiones claras para conseguir el empate, y la UC desperdició algunas oportunidades para sentenciar el duelo.

El empate de Vergara en el 91 cayó como un mazazo en el estadio San Carlos de Apoquindo de Santiago, que unos minutos después estalló de alegría con el penalti transformado por el argentino Aued.