El Flamengo con un pie y medio en las semifinales de la Libertadores

Con dos latigazos, uno de De Arrascaeta y un segundo de Gabigol, el Flamengo enmudeció al Corinthians a domicilio (0-2) y encaminó su clasificación para las semifinales de la Copa Libertadores, que será la tercera en los últimos cuatro años. La calidad individual de dos de los mejores jugadores rubronegros marcó la diferencia en un clásico que enfrentó los dos clubes con mayores 'torcidas' en Brasil. La vuelta, programada para la próxima semana en Maracaná, suena a trámite viendo el poco poder de reacción de los paulistas cuando se vieron atrás en el marcador.

El Timao, que no pudo contar a última hora con Willian por culpa de unas molestias, salió a morder, con una alineación polémica ya que el portugués Victor Pereira se entestó en dejar en el banquillo al extremo Roger Guedes (con lo que dejó muy desasistido a Yuri Alberto) y al volante Giuliano. Además perdió muy pronto a Maycon, una de sus apuestas en la medular, por un pisotón.

Todo estaba bajo el control de los corinthianos con un Flamengo muy reactivo, hasta que el colombiano Cantillo cometió el error de perder un balón dentro de la propia área, que acabó en los pies de De Arrascaeta antes de tocar el brazo de Joao Gomes. Y el uruguayo finalizó por toda la escuadra con maestría con un cañonazo. El VAR no entró en acción. Allí, en el minuto 37, se acabó todo lo que el Timao tenía para ofrecer.

El Flamengo, hasta entonces pragmático, sacó pecho y se hizo el dueño de la situación. Todo el segundo tiempo fue rubronegro. El 0-2 llegó pronto, en el minuto 50, en un contragolpe en que Rodinei la dejó para que Gabigol, libre de marca, se sacara otra finalización espectacular.

Con un Timao muerto, los cariocas administraron el partido a placer y mostraron que tienen banquillo y recursos para luchar por el título continental, con la entrada de sus dos fichajes estrella en esta ventana de contrataciones: el exblaugrana Arturo Vidal y el extremo Éverton Cebolinha, repatriado del Benfica.

El Flamengo ya mira el cruce entre Vélez Sarsfield y Talleres, que la próxima madrugada jugará el primer round, de donde saldrá su hipotético rival en las semifinales... porque el Corinthians no gana un partido como visitante en la Libertadores desde 2018. Y el próximo martes, en Maracaná, necesitará una victoria por dos goles, como mínimo, para llevar la eliminatoria a los penaltis. O sea, una quimera disfrazada de milagro.