Mbappé mete al PSG en la final de Copa por los pelos

Mbappé celebra uno de los dos tantos que consiguió

Mbappé celebra uno de los dos tantos que consiguió / AFP

Alba López

Con más apuros de los previstos, el PSG se coló en la final de la copa francesa de la mano de un Mbappé estelar que tapó las carencias del equipo de Unai Emery con un doblete que es oro y sirve a los parisinos para poder medirse al modesto Les Herbiers (un Segunda B francés) en la finalísima del 8 de mayo.

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Copa de Francia

1
3
Alineaciones
Caen
Samba; Genevois, Da Silva, Djiku, Bessat; Kouakou (Feret, 59'), Peeters, Diomande, Deminguet (Avounou, 74'), Rodelin; Santini (Crivelli, 46').
PSG
Trapp; Meunier, Marquinhos, Thiago Silva, Yuri; Lo Celso, Rabiot, Draxler (Pastore, 72'); Mbappé (Dani Alves, 87'), Cavani, Di María (Nkunku, 93').

Una internada de Di María por el costado izquierdo en los primeros minutos avisó de lo que podía ser el partido, pero el argentino se equivocó buscando a Cavani y desperdició la opción de avanzar a los parisinos en el marcador. Fue el primero de los múltiples acercamientos de los 'rouge et bleu' sobre la portería de Samba en el arranque ante un Caen que bastante tuvo con capear el temporal.

Mbappé fue otro de los protagonistas del PSG en el Michel d'Ornano. La perla del equipo de Emery dio todo un recital de cambios de ritmo en banda derecha que trajo por el camino de la amargura a la zaga local. De sus botas pudo nacer el primer gol del choque, pero Di María se mostró errático en boca de gol. Antes, el Fideo ya se había estorbado con Cavani dentro del área.

Al final, sin embargo, tanto fue el cántaro a la fuente que terminó rompiéndose mediado el primer acto cuando Cavani remataba mordido dentro del área y Mbappé, quién si no, que pasaba por ahí, remachó el balón al fondo de las mallas a placer.

El tanto, sin embargo, no modificó el planteamiento del Caen, que continuó guardando la ropa antes de lanzarse a la desesperada al ataque. Sabían los discípulos de Patrice Garande que si lo hacían podía desatarse la lluvia de goles parisina. Y consiguieron minimizar daños. Tanto es así, que al filo del descanso conseguían empatar el partido gracias a un disparo de Diomande desde la frontal que rozó en Rabiot y engañó a Trapp por completo colándose en la red.

Tras el paso vestuarios el PSG quiso poner las cosas en su sitio por la vía rápida y pudo haberlo hecho si el colegiado no le hubiera anulado un gol a instancias del VAR por posición antirreglamentaria de Cavani. Después fue Di María quien probó fortuna con un latigazo escorado envenenado que no entró de milagro.

Por aquel entonces, el partido ya se había convertido en un monólogo 'rouge et bleu'. El 1-2, sin embargo, se hacía de rogar. Hasta que Cavani encontró a Mbappé dentro del área y fusiló a Samba a placer con el beneplácito del VAR, que esta vez respetó (mal hecho, porque había fuera de juego) el tanto de los de Emery, que se meten en otra final de Copa y aspiran a un triplete que no será igual sin la Champions League de por medio. Nkunku redondeó el marcador para el PSG en el añadido tras saltar al campo en sustitución de Di María