Preocupación en LaLiga por los derechos de la Copa del Rey

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El Valencia es el último ganador de la Copa del Rey / EFE

Ramón Fuentes

Ayer viernes se reunió en Madrid la Comisión Delegada de la Liga, cita donde se han aprobado la cuentas de este año 2019 en la patronal además de decidir retrasar la decisión de la propuesta que el Murcia ha presentado ante la Liga donde se propone pagar la deuda que el club tiene con distintos acreedores. Desde la patronal quieren estudiarlo con detalle porque puede sentar un precendente.

Pero sin duda el tema estrella ha sido la tremenda preocupación entre los clubes sobre los derechos de la Copa del Rey, y cuyo concurso público acaba de ofertar la RFEF tanto en España, Europa como en el resto del mundo. El estamento federativo no ha encontrado todavía un operador para emitir este torneo la temporada 2019-2020.  Más teniendo en cuenta el impacto económico que ya ha supuesto el no poder jugarse los lunes. Algo que está recurrido por vía judicial. 

Como ya explicamos el pasado 14 de agosto en SPORT, la RFEF tendría que lograr 170 millones de euros para que la RFEF ingrese lo que venía percibiendo hasta como resultado de la venta conjunta de los derechos de liga y Copa por parte de la patronal y por los que esta pasada temporada 2018-2019 el estamento federativo ha percibido 17 millones de euros. 

LOS ANTECEDENTES

Hasta esta pasada temporada ha sido la Liga quien ha venido comercializando las tres competiciones (Liga, Copa y Supercopa) conforme establece el Real Decreto de Venta Centralizada del 2015. Concretamente en su artículo 8 relativo a  las “Especialidades en la comercialización y reparto de los derechos audiovisuales de la Copa de S.M. El Rey y de la Supercopa”. 

Pero el mismo artículo recoge también que la Real Federación Española de Fútbol podrá comercializar directamente los derechos audiovisuales de la Copa y de la Supercopa de España, escenario en el que nos encontramos para esta temporada en cuestión y de donde surge la preocupación de los clubes. Porque esta explotación exclusiva federativa viene condicionada en el Real Decreto con unos porcentajes de reparto:  Así “el 90 por 100 de los ingresos se destinará a los equipos de la Liga Nacional de Fútbol Profesional” donde además “se tomarán en consideración únicamente a las entidades que disputen la ronda de octavos de final de la competición durante las cinco últimas temporadas, con la siguiente ponderación: Campeón 22 por 100; Subcampeón, 16 por 100; Semifinalistas, 9 por 100, Cuartos de Final, 6 por 100, Octavos de Final, 2,5 por 100.”

Solo “el 10 por 100 restante se destinará a la promoción del fútbol aficionado y a los equipos de otras categorías que participen en la competición”.  Es decir que de esa cantidad total, la RFEF percibe un 10 por ciento que debe destinar al fútbol amateur. Luego para poder seguir percibiendo íntegramente la RFEF esos 17 millones resultantes de la venta conjunta con LaLiga, tendrá que percibir del operador que los adquiera unos 170 millones de los cuales alrededor de 160 millones se deben repartir entre los clubes según los parámetros anteriormente expuestos, quedando el montante restante para la RFEF.

Números que desde la Liga, como quedó evidenciado ayer en la Comisión Delegada, parecen prácticamente imposibles lo que supone una pérdida adquisitiva importante respecto a lo que venían ganando hasta ahora de los ingresos generados por la Copa del Rey. De ahí la preocupación mostrada en la reunión de ayer por los 14 clubes del fútbol profesional que componen este organismo de la patronal.