La Liga y la Federación buscan fecha para la aplazada final de Copa

Aficionados con banderas de la Real Sociedad y el Athletic

Aficionados con banderas de la Real Sociedad y el Athletic / EFE

Ramón Fuentes

La decisión adoptada por la RFEF respaldando a los dos finalistas de Copa, Athletic y Real Sociedad, de jugar el encuentro una vez que pueda hacerse a puerta abierta, genera un problema de cara al calendario de la próxima temporada. Un calendario que planifica LaLiga consensuadamente con AFE y que luego debe trasladar a la RFEF para su ratificación. En caso que esta última no lo acepte en dos ocasiones, queda en manos del CSD. Un calendario que la próxima temporada va a estar condicionado por dos aspectos muy importantes. Las previsiones de LaLiga pasan pie arrancar a mediados de septiembre, un mes después de lo habitual, y en una temporada condicionada por la disputa de la Eurocopa que obliga a tener que acabar a finales de mayo.

Y en este calendario tan comprimido deben encajar dos finales de la Copa del Rey. La pendiente de la temporada actual, una vez que todas las partes quieren jugarla a puerta abierta, además de la disputa de la edición 20-21.

Pero además, según recoge el actual convenio entre la Liga y RFEF, está fiesta del fútbol en condiciones normales debe celebrarse en el mes de abril. Textualmente el convenio dice: “Se acuerda que para las temporadas 19/20, 20/21, 21/22 y 23/24 cada una de Eda finalice con la disputa de un partido del campeonato nacional de Liga, reservándose un fin de semana del mes de abril, a la elección de la RFEF, durante la temporada para la disputa de la final de la Copa del Rey, sin que se dispute en esa jornada el Campeonato nacional de Liga de Primera división...”. Luego esto nos lleva a dos situaciones para la próxima temporada. La primera que obliga a esta final de Copa del Rey a celebrarse siempre antes de finales de marzo del 2021. Pero además, y según este convenio, este derbi Vasco deberá jugarse en un fin de semana y donde no podrá haber Primera división. Y a este fin de semana hay que sumarle el otro también recogido en el convenio para la final de la temporada 2020-2021. Es decir dos fines de semana sin fútbol en Primera en un año tan comprimido en el calendario.

Veremos porque esto nos lleva a que esta edición, que además estará condicionada a cuando autorice Sanidad la vuelta a los estadios de las aficiones, podría jugarse en un fin de semana pero que no perturbe el resto de Primera división, aplazando sólo los duelos dónde estén implicados los dos equipos vascos y sus rivales.

Porque la última opción sería buscar un miércoles libre para su celebración. Algo que parece poco viable por varios motivos. Primero porque el convenio habilita a la RFEF a ser en fin de semana y porque además jugadlo en entre semana afecta al desplazamiento de las aficiones, al disputarse en el Estadio de la Cartuja de Sevilla. Está claro que la RFEF y LaLiga van a tener que llegar a un acuerdo para encajar esta final de Copa, este derbi Vasco histórico.