La anécdota entre Cruyff y Valdano en un Barça-Alavés de Copa

Jorge Valdano y Johan Cruyff

Jorge Valdano y Johan Cruyff / J.M. Arolas

David Salinas

David Salinas

La historia de los Barcelona - Alavés de Copa dejó una curiosa anécdota entre Johan Cruyff, entonces una de las ‘vacas sagradas’ del fútbol en activo, y un imberbe Jorge Valdano, que iniciaba su exitosa carrera. La escena tuvo lugar en el Camp Nou la noche del miércoles 22 de febrero de 1978.

El FC Barcelona afrontó el partido de vuelta (cuartos de final) contra el Alavés (entonces equipo de Segunda División) obligado a superar la derrota cosechada en Vitoria (1-0). No fue un partido nada fácil para el equipo de Michels, que sufrió de lo lindo para ganar 2-0 con goles del Torito Zuviría (de penalti) y Asensi.

La anécdota la desveló tiempo después Jorge Valdano y alcanzó popularidad por la carrera que el argentino hizo como jugador primero y entrenador después. Recordó que el partido fue muy sufrido por el Barça y Cruyff, además de moverse por donde quería, mandar y ordenar a su antojo, se ‘adueñó’ del balón. No lo soltó ni a tiros.

En un momento dado, Valdano, viendo la estrategia del holandés (no dejar el esférico al rival, que con un gol avanzaba a las semifinales), se acercó a Johan y le dijo:

–Mirá, ¿por qué no te llevás a tu casa esa pelota y nos das otra a nosotros para que podamos seguir jugando? –le espetó, al tiempo que el Flaco acomodó el brazo en su hombro y le dijo:

–¿Cómo te llamas?

–Jorge Valdano –respondió el entonces jugador del Alavés.

–¿Y cuántos años tienes? –preguntó Johan.

–Veinte –respondió Valdano, que en realidad tenía 22. Johan lo miró y le soltó:

–¿Y tú no sabes que a Johan Cruyff, con veinte años, se le trata de usted?

Valdano agregó que el capitán del FC Barcelona le contestó con un posado muy serio, pero luego esbozó una de sus clásicas sonrisas picaronas… Cruyff, que por aquel entonces contaba casi 31 años y había ganado tres Copas de Europa y tres Balones de Oro además de muchos otros trofeos colectivos e individuales, estaba ya de vuelta de todo, aunque no colgaría las botas hasta la campaña 1983-84, en las filas del Feyenoord.