COPA DE ESPAÑA 2020

Un solitario tanto de Humberto mete a Inter en las semifinales

Joao Batista protege la pelota ante la presión de Gadeia

Joao Batista protege la pelota ante la presión de Gadeia / TWITTER

EFE

De nuevo como un recurso determinante, Humberto impulsó la apurada victoria y clasificación del Movistar Inter para las semifinales de la Copa de España 2020 de Málaga frente al Palma Futsal, doblegado por la eficacia del pívot brasileño y por las paradas de Jesús Herrero, quien sostuvo el triunfo del conjunto madrileño (1-0). 

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COPA DE ESPAÑA 2020

1
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Alineaciones
MOVISTAR INTER, 1
(1+0): Jesús Herrero (p.), Carlos Ortiz, Ricardinho, Gadeia, Pito -cinco inicial-, Borja, Humberto (1), Marlon, Bebe, Raya, Elisandro y Pola.
PALMA FUTSAL, 0
Carlos Barrón (p.), Lolo, Joao Batista, Tomaz, Diego Nunes -cinco inicial-, Eloy Rojas, Hamza, Vilela, Raúl Campos y Rafa López.

Hace un año, en el pabellón de la Fuente de San Luis de Valencia, Humberto resolvió también el enredo del Inter contra el Palma, con el 2-3 a cuatro minutos del final. 

Este jueves, en la apertura de los cuartos de final de la Copa de España de Málaga 2020 en el Martín Carpena, su protagonismo también fue incontestable. Ya aguarda rival en la penúltima ronda: Jaén Paraíso Interior o Viña Albali Valdepeñas, que se enfrentan entre sí desde las 19.00 horas.

Más firme que brillante, más práctico que estético, el equipo madrileño canalizó el partido y la victoria a través de su gol, porque no hay mejor fórmula que la eficacia en un partido tan cerrado, entre la tensión, la responsabilidad y la precaución que desprende el nulo margen de error que permite esta competición.

No hubo demasiado espacio para la innovación sobre la cancha, más allá del soporte tecnológico cuya puesta en escena se produjo a petición del técnico del conjunto madrileño, Tino Pérez, en el minuto 4 por un penalti reclamado de Lolo a Marlon (no lo entendieron así los árbitros tras ver la jugada de nuevo). 

Tampoco se corrieron más riesgos de los imprescindibles, ya que ambos equipos buscaron más aprovechar los fallos rivales y se centraron en no cometerlos. Sí hubo una cantidad inusual de tarjetas: cinco en los primeros ocho minutos.

Dentro del atasco general, cuando el Palma quizá se sentía más cómodo, con el juego mucho más tendente al campo rival que al suyo propio, de un saque de banda, un derechazo de Bebe y el pecho de Humberto, entre el remate o el rechace, surgió el 1-0. Un tesoro en un encuentro de tales características. Era el minuto 16.

No empató el Palma porque Jesús Herrero fue una garantía en determinados momentos sobre todo en la segunda parte (también frustró Carlos Barrón el gol del Inter en alguna otra acción), pero siempre dentro de una inconstancia en las ocasiones.

Fueron esporádicas, muchas veces por lanzamientos lejanos, sin ninguna combinación definitiva, por más insistencia que le puso el conjunto balear, incluso con juego de cinco, en nivelar un enfrentamiento denso, ganado por Humberto. En los últimos instantes, Pola reapareció seis meses después.