Neymar Jr., imparable en la Copa América

Tite, seleccionador brasileño, ya avisó: ”Neymar me ha dicho, cuando estoy bien físicamente y de cabeza, las cosas salen”. Y es lo que está ocurriendo exactamente en esta Copa América, en la que el 10 del PSG está firmando un torneo mayúsculo.

En los cuartos de final, ante Chile, Ney volvió a ser decisivo en un tuya-mía espectacular con el que Paquetá marcó el 1-0 definitivo y selló el pasaporte a semifinales. Son dos goles y tres asistencias en cuatro partidos (descansó en el intrascendente choque con Ecuador).  A lo que hay que sumar, su ascendencia en el juego constructivo y de definición de la Canarinha.  Ahora mismo es imparable en el contexto sudamericano.

Tácticamente, Tite lo ha sacado de la banda para darle libertad de movimientos, en un ataque donde ha llegado a jugar simultáneamente al lado de tres delanteros: Richarlison, Gabriel Jesus y Firmino (y cuando ha entrado Gabigol). Con un centrocampista de llegada, como Paquetá o Everton Ribeiro, aún mejora sus prestaciones en el juego asociativo.

La realidad indica que esta versión del Neymar total en la Copa América es capaz de fabricarse y ejecutar las jugadas decisivas, desequilibrando para construir triunfos.

Brasil-Perú, la última final ahora en versión semifinales

La Seleçao, que sufrió lo indecible para eliminar a una combativa Chile (1-0) en cuartos de final, tiene ahora un cruce de semifinales mucho más asequible ante la Blanquirroja, que se deshizo de Paraguay en los penaltis tras un espectacular 3-3 en unos 90 minutos de vértigo.

El Brasil-Perú, del lunes, es la reedición de la última final del torneo en 2019, con triunfo local (3-1). En la primera fase, los de Tite ya vapulearon a los de Gareca por 4-0, un precedente que muestra la brecha futbolística existente entre las dos selecciones. Sin embargo, nadie pude despreciar el mérito peruano de volver a colarse entre los cuatro mejores del continente, aún más cuando no cuenta con su Paolo Guerrero, perfectamente sustituido por el ‘italiano’ Gianluca Lapadula.