El Bayern sufre para seguir vivo en la Copa

Hertha y Bayern se vieron las caras en los octavos de la DFB Pokal

Hertha y Bayern se vieron las caras en los octavos de la DFB Pokal / EFE

X. Serrano

La Copa de Alemania es un torneo imprevisible. Si este martes cayó eliminado el <strong>Dortmund</strong>, este miércoles el Bayern sufrió para acceder a cuartos de final tras doblegar por la mínima al Hertha Berlin. Un gol de Coman en la prórroga valió a los de Niko Kovac para acceder a la siguiente ronda, tras el 2-2 con el que acabó el tiempo reglamentario. 

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DFB Pokal

2
3
Alineaciones
Hertha Berlin
Jarstein; Lazaro, Stark, Rekik, Plattenhardt; Skjelbred (Lustenberger, 103'), Grujic; Kalou (Klunter, 82'), Duda (Torunarigha, 110'), Mittelstadt; y Ibisevic (Selke, 64').
Bayern Múnich
Ulreich; Kimmich, Süle, Hummels, Alaba; Goretzka, Alcántara; Gnabry (Ribéry, 89'), James Rodríguez (Javi Martínez, 119'), Coman (Müller, 120'); y Lewandowski.

El encuentro arrancó de forma enloquecida, con dos goles en los compases iniciales. Mittelstadt adelantó al Hertha con un potente derechazo desde la frontal y, acto seguido, Gnabry igualó la contienda tras engatillar de volea un balón suelto en el área. El internacional alemán se erigió en el referente ofensivo del cuadro bávaro y protagonizó las ocasiones más claras antes del descanso, pero ambos envites fueron neutralizados por Jarstein

A este rápido intercambio de golpes siguió un primer tiempo pausado, con el Bayern intentando imponer su ley mediante el balón y el conjunto capitalino defendiéndose de forma ordenada. Este equilibrio no se rompería hasta después del descanso, cuando una rápida triangulación permitió a Gnabry plantarse ante Jarstein y batirle con un derechazo cruzado. 

La ventaja no varió un ápice el planteamiento del conjunto de Niko Kovac, que siguió monopolizando el cuero en campo rival. Parecía tener el duelo controlado el Bayern, pero el Hertha volvió a meterse en el partido merced a un error garrafal de Hummels. El central midió mal a la hora de ceder el balón con la cabeza a Ulreich y permitió a Selke, atento, robar el esférico e igualar el marcador. 

La igualada no hizo más que acrecentar las diferencias entre ambos equipos. El conjunto berlinés, ordenado, se encerró atrás y fio sus opciones a un contraataque que nunca llegó. El cuadro bávaro, por su parte, movió el balón con paciencia pero sin profundidad y apenas generó una ocasión en 20 minutos. James no acertó a rematar entre los tres palos un buen centro al punto de penalti. 

En fin, el conservadurismo de unos y la tibieza de otros condenó el encuentro a la prórroga. Tampoco varió el guión en el tiempo extra. Dueño del esférico, el Bayern siguió buscando el arco rival con insistencia hasta que Coman logró el ansiado gol de la victoria. Curiosamente, en una acción a balón parado. Tras el 2-3, le faltaron fuerzas al Hertha y le sobró dominio a los de Múnich para que el marcador no se alterara.