¿Cómo tomarse las cosas con humor?

"Tomarse la vida con humor implica no caer en el victimismo, desterrar los bucles de pensamientos negativos y dejar de lamentarnos, mientras nos lanzamos a actuar"

¿Cómo tomarse las cosas con humor?

Chicho sonriendo y tomándose las cosas con buen humor

Los malos momentos existen. Sean pequeñas desgracias del día a día o auténticas tragedias vitales debemos otorgarles la importancia que tienen. Pero tomarse las cosas con humor puede marcar una gran diferencia y, al contrario de lo que solemos pensar en ocasiones, no significa inacción ni desinterés. En realidad, y como explican desde el portal web de La mente es maravillosa, "tomarse la vida con humor implica no caer en el victimismo, desterrar los bucles de pensamientos negativos y dejar de lamentarnos, mientras nos lanzamos a actuar". Es una actitud más positiva y proactiva ante los problemas.

Una actitud que proporciona bastantes beneficios a nuestra vida. Así lo aseguran desde Psicología y Mente. En concreto, y según sus especialistas, tomarse los problemas con buen humor ayuda a afrontar el estrés, a atraer personas a nuestro alrededor, a mejorar la retención de memoria a largo plazo, a relajarse, a cuidar la salud cerebral, a cuidar la salud cardíaca y a ser más feliz. Beneficios que todos querríamos para nosotros mismos. Y, si bien es cierto que todas las personas tienen una predisposición concreta a lidiar con los problemas desde un enfoque, tenemos margen de maniobra y redirección.

Así, desde Psicología y Mente aconsejan varias acciones que pueden ayudarnos a tomarnos las cosas con una mejor actitud. Al fin y al cabo, la negatividad solo entorpece la resolución o la aceptación de lo que nos ocurre. ¿El primer paso? Acostumbrarnos a adoptar una perspectiva distanciada. Gracias a esto vamos a percibir las cosas desde un enfoque neutral, o relativamente neutral, y a observarlas "como si todo eso no formarse parte de la realidad en la que uno vive". Es mucho más fácil descubrir la ironía y lo cómico cuando lo vemos desde fuera. Como si fuera una especie de serie de televisión. Requiere práctica.

Como también lo requiere el segundo consejo de los especialistas de Psicología y Mente: no tener miedo al que dirán. Después de todo, el humor siempre comporta un riesgo. Es importante hacer gala de él incluso si no sabemos si resultará gracioso para los demás. Lo peor que puede ocurrir es que no se rían, pero el efecto que tendrá en nosotros expresarnos cómicamente ante las malas situaciones bien merece la pena. Y todavía más si aprendemos a reírnos de nosotros mismos. "Saber bromear acerca de uno mismo es fundamental y posiblemente la regla más importante para potenciar el sentido del humor". Es saludable.

Aunque hay otras reglas. Esta vez recurrimos a las recomendaciones de CuerpoMente, otro portal experto en bienestar. Una de las más interesantes consiste en dedicar un tiempo semanalmente para agradecer por todas las cosas positivas que nos ocurren. El humor puede proceder de un estado negativo, pero es bastante más saludable cuando lo hace desde el conocimiento de todo lo bueno que tenemos. Además, recomiendan que busquemos situaciones de humor con frecuencia como películas o vídeos, realizar tareas creativas con un enfoque cómico y aplicar sentido común al sentido del humor. Todo suma.