"Sin público, el Clásico es un producto de márketing"

Pau Riera y Jordi Brescó, en la fuente de Canaletes

Pau Riera y Jordi Brescó, en la fuente de Canaletes / VALENTÍ ENRICH

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

Jordi Brescó (28) llega caminando a Canaletes, la fuente situada en lo más alto de La Rambla, a escasos metros de la plaza Catalunya. Saca el móvil de su tejano negro y llama. A su espalda aparece Pau Riera (26) y Jordi cuelga. Le buscaba a él. Desde el otro lado de calle observa la escena Valentí Enrich y un servidor, sentados en un banco de hierro gris enganchado al pavimento. Hemos citado a Jordi (escritor) y Pau (fotógrafo) para hablar de ‘Rivalidades Crónicas’, un libro que recorre diez ciudades europeas en busca de sus derbis, la excusa perfecta para hablar del Clásico“En cierta manera, es el derbi de España”, explican.

Tras saludarnos como se saluda en tiempos de pandemia, sin saber exactamente qué hacer, nos adentramos en el carrer de la Canuda hasta vernos escupidos en la plaza Villa de Madrid. El Clásico nos persigue. Durante un año disfrutaron de rivalidades tan singulares como las que enfrentan a Galatasaray y Fenerbahce, AIK y Djurgarden en Estocolmo o Génova y Sampdoria. ¿Qué tiene de singular un Barça-Madrid? “En este tipo de clubs la relación con sus ciudades a nivel social, cultural y política está cada vez más desdibujada”, afirma Jordi, cuyo relato es más duro que el de su compañero. Para Brescó, “la rivalidad es puramente deportiva, el Real Madrid ya no es representativo a nivel institucional de España y el Barça dejó de ser, como decía Montalbán, el ejército desarmado de Catalunya”. Pau no lo ve tan claro: “Desde el punto de vista de la afición no lo veo tan claro, sobre todo en la del Barça. En cambio, es evidente desde la perspectival del club”.

Jordi pone un ejemplo: “En Sankt Pauli nunca se habría jugado el partido que el Barça jugó el 1 de octubre de 2017”. Como entonces, el Clásico se disputará en un Camp Nou vacío y Jordi solo ve en él “un producto de márketing. Es el puto fútbol moderno”. Pau coincide, pero asume que “el sábado estaré haciendo el vermut esperando el partido”. Es moderno, pero sigue siendo fútbol.

'RIVALIDADES CRÓNICAS', DIGNO HEREDERO DE 'FÚTBOL CONTRA EL ENEMIGO'

Editado por Panenka, ‘Rivalidades Crónicas’ es un viaje que va más allá del fútbol y se adentra en la cultura, la política, la geografía, la religión e incluso la antropología de diez ciudades (Sheffield, Estambul, Praga, Génova, Belfast, Glasgow, Nicosia, Hamburgo, Belgrado y Estocolmo) a través de sus derbis. Extremadamente documentado, el libro es digno heredero del icónico ‘Fútbol contra el enemigo’, cuyo autor, Simon Kuper, prologa esta extraordinaria obra.