La Prensa madrileña envía a Zidane al rincón de pensar

Las portadas de la Prensa en Madrid y Barcelona sobre el clásico Real Madrid - Barça 2017/18

Las portadas de la Prensa en Madrid y Barcelona sobre el clásico Real Madrid - Barça 2017/18 / SPORT.es

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La resaca del clásico Real Madrid - FC Barcelona (0-3) fue tan dulce en las portadas de la Prensa de Barcelona Barcelona como agria en las de Madrid, con Zinedine Zidane como principal señalado del fiasco madridista. No se libran Benzema, uno de sus protegidos, o Kovacic, la novedad en la alineación por Isco; pero es el técnico francés el que concentra las quejas de la crítica.

Duro 'Marca'

Quizás los más expresivos sean los compañeros de 'Marca' con su titular: 'Zidane, al rincón de pensar'. "Se acabó el mejor año de la historia del Madrid de la peor manera posible, con una victoria incontestable del Barça", comienza el análisis post-partido.

A continuación, de lo colectivo a la personificación con Zidane "como primer señalado de la derrota. El artífice del inolvidable 2017, al que se le añade la Champions y el Mundial del año pasado, naufragó contra el Barça de Valverde, intervencionista en el dibujo a través de Paulinho. El galo apostó por anular a Messi. ¿Funcionó? Rotundamente no", contrastan su labor con la del entrenador del Barça. "Que Isco no jugara ningún minuto, lo que tardó en hacer los cambios de Asensio y Bale... La falta de autocrítica no le ayuda".

En cuanto a "los nombres propios de la derrota del Madrid empiezan por la B de Benzema", argumenta el cronista, para añadir que "también quedó señalado Kovacic... En la lista aparecen por detrás Carvajal, que con su mano dejó al equipo con 10, Marcelo, superado en incontables acciones de uno contra uno... Hasta Cristiano estuvo desaparecido. Para olvidar", concluye.

También 'As'

No menos contundente es el diario 'As' que en varios artículos incide en los nombres propios d ela derrota madridista ante el Barça. Si algo valioso tiene el Real Madrid es su altísimo grado de autoestima, alimentada por su impresionante palmarés y por un vigor competitivo que apenas tiene rival en el mundo. El Madrid es orgulloso por naturaleza. Puede aceptar su inferioridad y competir desde el sufrimiento, pero no desde el miedo, el peor de sus defectos en la derrota frente al Barça. Con una decisión de Zidane que dejará huella en su carrera como técnico, el Madrid proclamó a todo el mundo su terror a Messi.

Este mismo diario incidía en la suplencia de Isco en el Clásico que "ha irritado al madridismo" pues "no entendió que Zidane apostara por Kovacic en lugar del malagueño contra el Barcelona". Según una encuesta realizada en la web de As, el 76% cree que no merecía estar en el banquillo".

Prensa general

"El Barça se come al Real Madrid", aseguraba 'El País' en donde se admitía que "el Barça dejó al Madrid en la lona de la Liga tras un ejercicio sutil".

Recordó que el equipo de Valverde "llegó con alfileres por falta de efectivos y porque su banquillo da para lo que da, nada ver con el deslumbrante armario de su adversario", el Real Madrid. "Pero supo curtirse y fajarse de entrada y dar la estocada con Messi mediante. Un tipo tan singular que donde otros desgastan suela él se desmarca andando, de puntillas. Con Ernesto Valverde este Barça con más tambores que violines encontró en el mejor feudo posible una victoria reivindicativa como pocas".

La conclusión es que "todo se alteró tras el descanso. Se diluyó el remedio de Kovacic, que quién sabe si a la larga no le pasará factura a Zidane". Y así, resultó "demasiado para un Madrid desplomado, solo espectador del Barça más sinfónico. Ni Kovacic, ni Casemiro, ni Kroos, ni Modric… Todos, uno tras otro, se fundieron". 

'Zidane hizo el pasillo al Barça', sentencia 'El Mundo del siglo XXI' en su crónica. "El fútbol habla poco de fútbol. Mal asunto... Era, asimismo, la semana después del Mundialito conquistado por el Madrid, por lo que en la capital se hablaba del pasillo. Llegados al campo, donde no cabe más remedio que tomar decisiones, que jugar, el único pasillo fue el que Zidane abrió al Barcelona, interpretado por su elección para el clásico, Kovacic, hecho un lío en el primer gol azulgrana. Ese pasillo conduce a una Liga que únicamente se observa, hoy, de otra forma en la ciencia ficción".