El ocaso de Marcelo ante la excelencia de Alba

Son las dos caras en el tiempo del Clásico, de dos laterales que lo han sido todo en sus equipos pero sólo uno sigue ejerciendo

El brasileño ha envejecido prematuramente y es una rémora frente a la segunda juventud del barcelonista

Marcelo y Jordi Alba dos estilos y dos estados de forma

Marcelo y Jordi Alba dos estilos y dos estados de forma / Efe

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Uno de los duelos en el tiempo del Clásico es el que deberían mantener Jordi Alba y Marcelo. Un tiempo en el que el brasileño ha envejecido prematuramente frente a la segunda juventud del barcelonista. Ambos han sido los dos mejores laterales izquierdos del fútbol español de los últimos años, cada uno con su estilo, marcando diferencias en sus bandas pero uno sigue ejerciendo y el otro es una rémora, un quiero pero no puedo.

Marcelo es solo un año mayor que Jordi Alba, 33 y 32, pero sobre el campo el brasileño parece entrar en su recta final por su bajón físico futbolístico. Todo lo contrario que el de Hospitalet, que sigue haciendo diabluras por su banda, imparable con sus internadas a los espacios pese a que las defensas rivales lo saben. Uno mantiene el tipo y el otro es una sombra de lo que fue pese a sus intentos de recuperar esa magia que le hacía diferente.

SOLO SE PARECEN EN QUE SON VUELNERABLES EN DEFENSA

Marcelo es toda una institución en el Real Madrid. Fue capaz de borrar el recuerdo de su antecesor, Roberto Carlos, de un día para otro pese a que su compatriota está considerado el mejor lateral izquierdo que ha tenido el equipo blanco en su historia. Jordi Alba es una de las piezas indispensables del Barcelona. Su jerarquía en el campo es incuestionable. Aunque tienen estilos muy diferentes se parecen en algo, que defensivamente son vulnerables.

Koeman está pendiente de recuperar a su lateral tras sufrir un esguince de tobillo ante el Dinamo de Kiev. Para el holandés es imprescindible por su capacidad ofensiva y velocidad en el repliegue. Ancelotti, por su parte, valora más al brasileño con palabras que con hechoe. Recuperar a Mendy elimina el debate de quién será titular en el Clásico. El francés ha mandado al banquillo al brasileño, pero no por su potencial defensivo sino por el bajón futbolístico de su compañero.