Acabar con muchos delanteros no salvó al Barça

Koeman, felicitando a sus jugadores tras el clásico

Koeman, felicitando a sus jugadores tras el clásico / AFP

Jordi Delgado

Jordi Delgado

Ronald Koeman le costó hacer cambios en el clásico. El técnico neerlandés no lo veía claro e introdujo a los primeros refuerzos en el minuto 82 de partido, con poco margen de maniobra para Trincao, Dembélé y Griezmann.

Finalmente, a tres minutos del final, Koeman también apostó por la frescura de Braithwaite, pero no tuvo oportunidades para destacar.

Con estos cambios, Koeman demuestra lo que ya parece ser un patrón, introducir a atacantes e incluso sacrificar a centrocampistas para ello, con el objetivo de conseguir la remontada. Ya ocurrió la semana pasada en Getafe, pero tampoco funcionó para conseguir el gol que reviertese el luminoso. Ante el Madrid, fue incluso perjudicial, ya que los merengues terminaron consiguiendo el tercer y definitivo gol.

En el Coliseum, el entrenador introdujo a Ansu Fati y Coutinho en el 62, sacando del campo a Pedri DembéléBraithwaiteTrincao, y finalmente Riqui Puig fueron los siguientes en entrar por GriezmannDe Jong y Sergi Roberto ya pasados los ochenta, terminando el partido con un equipo bastante desorganizado, con tres defensas y Riqui actuando de boya entre las líneas. El Barça no marcó y finalmente perdió ese partido, e incluso permitió que el Getafe creara una de las ocasiones más claras del partido.

En el clásico, los cambios fueron por PedriAnsu Fati y Busquets, y finalmente el último elegido fue Jordi Alba. Sin un lateral y un centrocampista menos, el Barça colocó una línea de cinco atacantes, y Coutinho se colocó de pivote con De Jong. Los tres minutos de añadido de Martinez Munuera no fueron suficientes y tampoco se pudo ver portería.