Modolo se impone en una etapa nerviosa antesala de las últimas etapas de montaña de este Giro

La etapa número 17 estaba marcada como una de las tranquilas, de tomarse con algo de tranquilidad para afrontar las últimas tres jornadas montañosas. Pero en este Giro no hay día de paz. La de este miércoles, una etapa de perfil prácticamente llano con un recorrido que discurría por parajes impresionantes de frondosa naturaleza, se ha convertido en una auténtica rompepiernas en la que los ciclistas no pudieron relajarse apenas.

La victoria se decidió al sprint tal y como estaba previsto y se la llevó Sasha Modolo, del Lampre, tras el excelente trabajo de su equipo, que supo organizarse a la perfección en los últimos kilómetros para lanzar el sprint al especialista que se convirtió ayer en el único ciclista que repite victoria en este Giro.

La general quedó igual, sin cambios y comandada por Alberto Contador, que pese a que tiene la carrera muy bien encarada, lo cierto es que aún quedan jornadas complicadas antes de llegar a Milán.

La escapada de la jornada la protagonizaron tres corredores, los italianos Marco Bandiera (AND) y Giacomo Berlato (VIN), y el belga Iljo Keisse (EQS), pero nunca consiguieron grandes ventajas. Se movieron entorno a los 2 minutos y medio hasta que el pelotón decidió empezar a trabajar para darles caza. Fue el equipo Treck Factory quien tomó la iniciativa a 80 km de meta ayudado por el Giant. Poco a poco empezaron a tomar velocidad al pelotón. Recortaban paulatinamente, pero el viento en las sinuosas carreteras no ayudaba a que la labor del pelotón tuviera el premio esperado. El viento entraba por detrás, de costado, por delante, los valles del lago Como se convierten en emboscadas que obligan a los ciclistas a estar tensos en todo momento para evitar cortes y sorpresas. Fue al final una de las fugas más largas de este Giro, pero una vez más no culminó. Pese a los largos relevos que hizo Keisse que provocaron que el pelotón tardara más de lo previsto en alcanzarles, a 30 km de meta el equipo I'm cycling y Lampre relevaron en cabeza a Giant y Treck para dar más ritmo y el resultado llegó pronto y a 27 km de meta se acabó la fuga.

Fue entonces cuando entró otro protagonista a escena. El australiano Adam Hansen del Lotto Soudal lo intentó en solitario tras las desavenencias de sus compañeros los primeros metros, el alemán Patrik Gresh y el colombiano Darwin Atapuma. Pero el equipo de Contador no estaba por la labor de que este veterano que ya lleva en sus piernas 18 carreras grandes cruzara la meta en solitario.

A 10,5 km de Lugano, Hansen fue engullido por un pelotón acelerado en el que los equipos empezaron a postularse para lanzar el sprint. También Luca Paolini del Katusha intentó una momentánea fuga, pero finalmente quien mejor se organizó fue el lampre que protegió a Shasha Modolo para que se convirtiera en el ganador de esta nerviosa etapa. 

La siguiente jornada será completamente diferente. Con un puerto de primera en el kilómetro 134 de la etapa que acaba en Verbania tras 170 km.