Hayman deja a Boonen sin gloria en la París-Roubaix

A los 37 años el australiano Mathew Hayman (Orica) ha conseguido el triunfo más importante de su carrera al imponerse en la 114 ª Paris-Roubaix después de 257 Km. Su triunfo ha sido una sorpresa en toda regla por cuanto batió en el sprint a uno de los grandes favoritos, el belga Tom Boonen, que aspiraba a convertirse en el único corredor que loga cinco victorias en la reina de las clásicas.Otro veterano, el británico Ian Stannard, completó el podio después de casi seis horas de carrera. 

Los tres corredores formaban parte de un grupo en el que se encontraban el noruego Boasson Hagen y el belga Sep Vanmarcke. Ambos no pudieron reaccionar a uno de los ataques de Boonen, a 4 km. de la llegada. Tan solo Hayman consiguió darle alcance y contratacar con más fuerza todavía. 

La 114 Paris-Roubaix fue un compendio de sorpresas por cuanto a 46 Km. de la llegada, el suizo Fabian Cancellara, que rodaba cortado a 35" por culpa de una caída a 116 Km. de la llegada, junto al campeón del mundo Peter Sagan y una docena de corredores sufrió una espectacular caída sobre los adoquines llevándose a Niki Terpstra y a otros.Sagan, haciendo un alarde del dominio de la bicicleta consiguió saltar por encima de él burlando la caída. Aunque el potente corredor de Trek, ganador de tres ediciones, siguió en carrera persiguiendo, su candidatura de cara al triunfo se quedó en la cuneta. El eslovaco tampoco consiguió entrar en el grupo de cabeza, entre otras cosas porque Boonen había dado órdenes de tirar a muerte para eliminar a los dos favoritos. Tony Martin echó el resto y también colaboraron equipos tan potentes como Sky y Lotto NL. 

Del grupo de siete corredores de cabeza Imanol Erviti se mantuvo con los mejores hasta que Vanmarcke atacó con una fuerza brutal en el Carrefour de l'Arbre, una de las zonas en donde el pavés está en peor estado. Tras darle alcance, el resto de corredores, Hayman, Stannard, Boonen, y Boasson Hagen lanzaron ofensivas durante los siguientes kiómetros, pero la victoria se decidió al sprint. 

 Hayman, condicionado durante la primera parte de la temporada por una fractura de radió, logró en el velódromo de Roubaix el triunfo más importante de su vida.Profesional desde el 2000, cuando disputó su primera gran clásica, el de Orica es el segundo ciclista australiano después de Stuart O'Grady que consigue la París-Roubaix.