Polonia, Hungría, Grecia y Chipre se ofrecen para alojar partidos de Champions

Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA

Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA / AFP

Javier Giraldo

La UEFA se reunió este jueves por vía telemática con los secretarios generales de las 55 federaciones europeas para analizar la situación de las competiciones europeas de la temporada 2020-21, que también  se verá afectada por las restricciones del coronavirus. 

La UEFA dio por hecho que algunos partidos de la temporada 20-21 "pueda ser necesario trasladar algunos partidos a países y estadios neutrales". En ese sentido, cuatro países se ofrecieron como sedes, al estilo de Portugal o Alemania en la presente edición de la Liga de Campeones y de la Liga Europa. Se trata de Polonia, Hungría, Grecia y Chipre. "Estos países han puesto a disposición algunos de sus estadios en las fechas programadas de los partidos, ofreciendo un corredor de viaje a los equipos para que pudieran llegar y jugar el partido sin restricciones", asegura la UEFA.

SE PIDE COOPERACIÓN

El organismo europeo también advierte de la dificultad para que el fútbol de selecciones de reanude en septiembre. "Se necesitará una estrecha cooperación entre todas las selecciones y la UEFA para garantizar la celebración normal de todos los partidos. La posibilidad de jugar partidos internacionales en sedes neutrales no se puede descartar".

Tampoco hay fecha prevista para el regreso del público a los estadios. "Tanto la UEFA como las federaciones nacionales son conscientes de la importancia de permitir el regreso de los aficionados a los estadios, pero la situación en Europa está muy fragmentada". 

En la reunión, la UEFA también recordó las restricciones sanitarias y de desplazamiento que deben seguir todos los equipos que siguen implicados en la Champions y en la Europa League, así como el protocolo médico a seguir, que incluye test PCR a todos los miembros de los equipos (jugadores, entrenadores y 'staff') 48 horas antes de cada partido.