Por qué tener a Guardiola nunca es un problema

Guardiola: "Gabriel Jesús ha sido el hombre de la eliminatoria"

Pep Guardiola se mostró contento tras eliminar al Real Madrid / Movistar

Pol Ballús

Pol Ballús

“El pitido final dio al equipo de Pep Guardiola en particular, y al City en general, su mejor resultado en la Champions League”. No es descabellada la frase publicada en <em>The Guardian</em> tras el partido de del viernes. Si bien es verdad que el Manchester City llegó a unas semifinales con Pellegrini, nunca hasta hoy había sido capaz de tumbar a un equipo de la altura del Real Madrid. “La diferencia entre nosotros y el Barça o el Madrid, es que ellos son malditos creyentes”, dijo Pep a su vestuario años atrás como mostró el documental que Amazon realizó en el club. Desde el viernes, en el Etihad creen un poco más.

La eliminatoria entre City y Madrid será recordada en Inglaterra como la del “Overthinking”, o lo que es lo mismo, el sobrepensar. Desde que les emparejó el sorteo, el entorno mediático inglés trató de buscar explicaciones a las últimas derrotas europeas de Guardiola. Llegaron a las siguientes conclusiones: Quiás el problema del City es que Pep sobrepiensa este tipo de partidos. Quizás innova demasiado Quizás innova demasiado. Quizás debería ser básico. Incluso mejor, ser pragmático e ir a ganar como sea.

Como si Pep jugara a perder. No se escapó el catalán de esas preguntas en su rueda de prensa en el Bernabéu, antes del duelo de ida. El de Santpedor las respondería en realidad sobre el césped. Si la gente empezaba a dudar del método, Guardiola se volvió más Guardiola. Revolucionó su once en Chamartín, dejando a Agüero, David Silva y Sterling en el banquillo, para iniciar con Gabriel Jesus en banda y Bernardo Silva de falso nueve. Más de lo mismo en el Etihad: Foden de delantero centro primero, Gabriel en punta después y el Madrid ahogado hasta el final.

Sin haber sido el mejor partido del City de Pep, se hace imposible no considerar a los ‘citizens’ uno de los grandes candidatos a esta Champions League. Si algo nos enseñó la eliminatoria es que pocas cosas más poderosas hay que un grupo de grandes jugadores que se convierten en “malditos creyentes”. Y que tener la mente de Pep Guardiola en tu banquillo nunca puede ser un problema, sino una tremenda virtud.