De Paul: "Una expulsión y dos penaltis deciden el partido"

El argentino, que no entra a valorar el acierto de las decisiones arbitrales, reitera que marcaron el choque

Diego Simeone se metió al túnel de vestuarios tras el pitido final sin dar la mano a Jurgen Klopp

Rodrigo De Paul.

Rodrigo De Paul / EFE

EFE / Madrid

El centrocampista argentino del Atlético de Madrid Rodrigo de Paul resaltó tras caer contra el Liverpool por 2-3 en el Wanda Metropolitano que "una expulsión", la de su compañero francés Antoine Griezmann, y "dos penaltis", el señalado en su contra y el corregido a su favor, "decidieron el partido". "No sé si está bien o mal, pero obviamente una expulsión y dos penaltis deciden el partido", manifestó De Paul en declaraciones a 'Movistar LaLiga'.

Pese a la derrota, De Paul se mostró satisfecho con la actuación del conjunto madrileño y afirmó que jugando a ese nivel no perderán más encuentros. "Hoy hubo dos grandes equipos que dieron un gran espectáculo y me quedo con eso, con la competencia. Compitiendo así va a ser muy difícil que ganen al equipo", añadió el centrocampista argentino.

Por su parte, el extremo belga del Atlético Yannick Carrasco opinó que cuando "hay contacto el VAR no tiene derecho a llamar al árbitro". Carrasco se refirió así a la jugada en la que hubo un penalti del portugués Diogo Jota sobre el uruguayo José María Giménez que el árbitro corrigió al mirarlo en el monitor. "El árbitro decide señalar penalti, hay contacto, y normalmente cuando hay contacto el VAR no tiene derecho a llamar al árbitro y eso ha pasado esta noche", opinó Carrasco en declaraciones a 'Movistar Liga de Campeones' tras el encuentro en el Wanda Metropolitano.

El portugués Joao Félix reconoció tras la derrota que el equipo rojiblanco "reaccionó" al 0-2 adverso en los primeros 13 minutos, pero con la expulsión de su compañero francés Antoine Griezmann el duelo "se hizo difícil". "Nos metieron dos goles, reaccionamos bien, y después con la expulsión se tornó difícil", analizó el delantero luso en declaraciones ofrecidas por el club tras el encuentro de Liga de Campeones. Griezmann fue expulsado en el minuto 52 del encuentro con roja directa por una acción de juego peligroso en la que levantó la pierna para alcanzar un balón y golpeó con la bota al delantero brasileño del Liverpool Roberto Firmino. A partir de entonces, el Atlético tuvo que defenderse con diez en un partido que en ese momento iba empate 2-2 y acabó con derrota 2-3 por el penalti anotado por el egipcio Mohamed Salah. "Se nota siempre el esfuerzo, con uno menos se tiene que dar un pelín más, pusimos en el campo el corazón y todo, lo intentamos pero no fue el día", consideró Joao Félix.

El punta luso fue protagonista en la primera mitad, al protagonizar una gran jugada en la que se deshizo de varios contrarios antes de dar la asistencia a Griezmann del gol que supuso el 2-2. "Mi fútbol es encarar, girar, uno contra uno, buscar a mis compañeros para que hagan gol, es lo que estoy haciendo y lo que me piden. Hay que seguir así para crear oportunidades para el equipo y que podamos meter más goles", añadió el '7' rojiblanco.

Por otro lado, Alisson Becker, portero del Liverpool, dijo que tuvo una buena visión de la jugada de Diogo Jota y José María Giménez y que tenía claro que no era penalti. "Estaba seguro que no era penalti. Tuve una buena visión de la jugada y me fui directo al árbitro a decírselo, porque a veces ellos no lo pueden ver bien. La revisión del VAR fue buena, esa es mi opinión. Con las imágenes, puedes verlo mejor y tomar una mejor decisión", explicó el guardameta. "No era fácil, había mucha presión por parte de la grada y de los jugadores, pero creo que tomó la decisión correcta", dijo Alisson.

Simeone no saludó a Klopp

Jurgen Klopp, entrenador del Liverpool, restó este martes transcendencia al hecho de que Diego Simeone, su homólogo en el Atlético de Madrid, no le diera la mano al término del partido de la Liga de Campeones en el Wanda Metropolitano, expresó que "no ha pasado nada" entre ellos y avanzó que en el próximo choque se volverán a estrechar la mano. "Ha sido un partido muy intenso, pero no creo que hayan estado jugando al límite. Iba a darle la mano, he visto que se metía para adentro, pero yo tenía las emociones a flor de piel también, al igual que él. No ha hecho nada. No ha pasado nada. No estoy tampoco muy contento con mi reacción. La próxima vez que nos veamos nos daremos la mano. Vivimos las cosas de forma muy intensa", dijo Klopp.

A su vez, Diego Simeone también habló de este hecho: "Cuando termina el partido siempre pensé lo mismo. Si a vos te toca ganar y a ti perder, otro te saluda con forceps, igual al revés. Y saludar con forceps no me gusta".

El alemán valoró que la tarjeta roja en el minuto 55 a Antoine Griezmann es "mala suerte", pero es expulsión, al tiempo que opinó que el penalti a favor de su equipo "era claro" y consideró que el partido fue una "lucha de verdad" entre dos grandes equipos. "No es fácil meterle dos goles al Atlético en 15 minutos. A veces tu propia cabeza puede ser tu mayor enemigo. No hemos sabido controlar bien el partido, hemos encajado dos goles, podíamos haber defendido mejor el 1-2", comentó en rueda de prensa en el Wanda Metropolitano. "Entiendo -continuó Klopp- que el Atlético y sus aficionados estén enfadados con ciertas decisiones del árbitro, pero el primer penalti era claro y el penalti para el Atlético, según lo veo yo, no era penalti, aunque me sorprendió que el árbitro lo anulase". "En cuanto a la tarjeta roja (a Griezmann), por supuesto que es mala suerte, pero es roja. Es un pie en la cara de mi jugador. Por esas cosas se sacan tarjetas rojas. Hemos tenido que defender muchísimo, incluso con 10 jugadores han jugado un fútbol muy intenso. Los tres puntos es lo más importante, los hemos conseguido y ha sido un gran paso adelante", explicó. "Hoy había sobre el campo dos equipos con muchísima confianza en ellos, en ganar. Esta noche ha sido una lucha de verdad. Nadie puede ganar este partido porque es mejor que el otro", continuó Klopp, que insistió en que no le gusta el estilo del Atlético: "Nos ha dejado jugar. Es su forma de jugar. Hay cosas que me gustan más y otras menos". "Pero respeto muchísimo lo que hacen. Yo no podría hacerlo. No soy la misma persona que Diego. Yo no podría jugar de esa forma, pero lleva aquí diez años con unos éxitos increíbles. No juega al fútbol que me gusta a mí, sino que le gusta a ellos. Y lo respeto muchísimo", añadió.

Por su lado, Simeone advirtió que no se va "contento" a pesar del buen juego, porque él se va feliz de un encuentro cuando gana, "aún jugando mal, horrible o feísimo", al tiempo que explicó que no se ha sentido perjudicado por el árbitro y desveló que Antoine Griezmann estaba "jodido". "No me voy contento. Contento me voy cuando gano aún jugando mal, horrible o feísimo. Cuando no ganamos, no me voy contento", enfatizó el técnico en la rueda de prensa en el estadio Wanda Metropolitano, donde remarcó que está "convencido de que el equipo está fuerte". "Un equipo que crea cuatro situaciones de gol claras al Liverpool habría que mirar no sé cuantas veces tuvieron que defender como defendieron hoy", continuó Simeone, que repasó que su rival empezó "mucho mejor, con dinámica y contundencia de cara al gol", con un 0-2 a su favor. "Otro equipo posiblemente se habría desmoronado, pero pasó todo lo contrario. El equipo respondió muy bien, empezó a ganar duelos, a tener mejor posesión, a atacar donde sabíamos que podíamos hacerle daño, apareció el 1-2, vino el 2-2, tuvimos ocasiones y empezó el segundo tiempo con la ocasión más clara de Carrasco que el portero lo vuelve a solucionar muy bien, luego llega la expulsión, el penalti, el penalti no cobrado, un partido lindo y dos equipos que quieren ganar", añadió.

Simeone no se siente perjudicado por el árbitro: "Puedo protestar, reclamar, enojarme en el campo, pero de la misma manera que los árbitros aciertan y se equivocan a nosotros nos pasa lo mismo. Tienen el VAR, fue a ver el penalti, si fue a verlo y vio que no era penalti... Y Griezmann interpretó o le avisaron que era una acción de roja. Perjudicar, no". "Griezmann estaba jodido. La actuación de Griezmann se valora solamente viendo el partido en todo lo que hizo. Qué bien se entendió con Lemar, Joao o De Paul, cómo trabajó el partido defensivamente... Está jodido. Después de la expulsión no se queda contento uno. La amarilla que le ponen al del Brujas en el partido con el City es igual. El del City lo choca pero él no lo ve. Está en la interpretación del árbitro y evidentemente esta interpretación no nos favoreció", expuso.