El Nápoles se estrella en Bélgica

El Nápoles no acierta a derribar el muro del Genk

El Nápoles no acierta a derribar el muro del Genk / MEDIAPRO

Francesc Ripoll

El Nápoles vivió uno de esos días donde no te sale nada. Espeso sobre el terreno de juego y errático en las finalizaciones, no pasó del empate a cero ante uno de los rivales flojos del grupo, el Genk. Los belgas, valientes, plantaron cara a los partenopeos e incluso tuvieron ocasiones para hacer saltar la banca.

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Champions League

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Alineaciones
Genk
Coucke; Maehle, Cuesta, Lucumi, Uronen; Berge, Hagi (Heynen, 91'), Hrosovsky; Bongonda (Paintsil, 89'), Samata, Ito
Nápoles
Meret; Di Lorenzo, Manolas, Koulibaly, Rui (Malcuit, 33'); Allan, Fabián, Elmas (Mertens, 58'); Callejón, Lozano, Milik (Llorente, 72').

Llegaba a la cita con la moral tocada el conjunto napolitanotras su derrota en liga. Y qué mejor forma de desquitarse que partido europeo. Los pupilos de Carlo Ancelotti salieron a lo que tenían que hacer: ganar. Aunque la intención existía, no dieron con la tecla. En la primera mitad, los napolitanos gozaron de buenas ocasiones para adelantarse en el electrónico, pero erraron claras ocasiones. En la mayoría, con el poste de protagonista.

Primero fueron Callejón y Milik los que se toparon con la madera. Una volea del español y el tiro del polaco corrieron la misma suerte. Poco después, mismos protagonistas, idéntico resultado. Centro del exmadridista y el ariete que cabeceó directamente al travesaño. Estas intentonas despertaron al Genk, que mostró una cara totalmente distinta a la que dio frente al Salzburgo. Incluso tuvo que aparecer Meret para evitar el primer gol local. 

No estaban cómodos los de Ancelotti sobre el césped, pero seguían llegando de todos modos. Hrosovsky sacó un tiro de Koulibaly en la mismísima línea de gol ante la desesperación del banquillo visitante. Al final del primer tiempo y tras el receso se crecieron los belgas, incomodando a un Nápoles desconocido. Incluso Ianis Hagi, hijo del mítico exjugador, pudo hundir a los italianos.

Metió mano del banquillo el técnico partenopeo, dando entrada a Mertens y Llorente. Se hincharon a meter centros al área que no encontraban rematador y Callejón falló un gol cantado. Otra vez Hagi, en el tramo final, a punto estuvo de dar la sorpresa aprovechando un resbalón de Allan. Pinchazo en Bélgica.