Mauricio Pochettino, el hombre milagro

Pochettino: "Jugar la final de la Champions es comparable a la final del Mundial"

 El Tottenham de Pochettino jugará la final de la Champions ante el Liverpool / PERFORM

EFE

Una década en los banquillos ha necesitado Mauricio Pochettino para encarar el momento más importante de su carrera como entrenador y liderar el trance más relevante en toda la historia del Tottenham Hotspur, su actual club, por primera vez en una final de la Liga de Campeones.

La entidad londinense pretende asentarse entre los clubes más relevantes de un fútbol inglés en plena escalada. El presente del Tottenham ha estado condicionado por la fuerte inversión realizada para disponer de un estadio a la altura de los tiempos. Y eso ha mediatizado la financiación de su plantel, expuesto a un período aparentemente de transición que ha culminado, de forma inesperada, en el momento más especial en la biografía del club. Cuarto puesto en la Premier y la final del Wanda Metropolitano. Cotas insospechadas meses atrás fruto de la siembra pasada, de bases establecidas y del trabajo de su mentor y hombre milagro, Mauricio Pochettino.

El técnico de Santa Fe, de 47 años, ha sido capaz de manejar un plantel limitado, sin refuerzos. El Tottenham, que terminó segundo en la fase de grupos por detrás del Barcelona y que selló la clasificación en la última jornada, salió airoso de los cuartos y las semifinales de forma milagrosas.

Sin Harry Kane, Pochettino tuvo que hacer encaje de bolillos para superar el trance. Llorente y Lucas Moura fueron parte del ideario del técnico argentino. Secundarios, hombres de club al máximo rendimiento cuando la ocasión lo necesita. Importantes en cualquier caso para el preparador de Murphy.

Cumple el técnico sudamericano su quinta campaña en Londres. Subcampeón de la Premier en la 2017 y tercero en la 2018 ha sido un técnico más que rentable. Tanto por los resultados obtenidos como por el rendimiento que ha conseguido en la entidad, a la que ha dotado de activos ahora de gran valor, procedentes del talento de sus divisiones inferiores. Es Pochettino un técnico que cree sobre todo en la energía. Da más valor a la persona, al jugador, que a los esquemas. Para el argentino, el rigor táctico lo dan los futbolistas.

Algunos le consideran alumno de la escuela de Bielsa. Él, no. "He trabajado con muchos. Con Marcelo, con Camacho, con Luis Fernández. De todos he aprendido", presume Pochettino, alineado con la presión alta, el ataque directo y la defensa compacta. una fórmula ideal para la Premier que ahora ha calado en Europa.

Un proyecto muy meritorio

"Somos el único equipo que no hemos fichado, algo que nunca había sucedido en la historia de la Premier y en toda Europa. Pero esto no ha sido lo único, el mérito de este proyecto es máximo. Comenzamos la temporada pensando que ya jugaríamos en nuestro estadio y no fue así hasta abril. Hemos tenido que jugar un lunes contra el City o un miércoles frente al West Ham porque la prioridad en Wembley eran conciertos o partidos de NFL. Además, hemos sufrido importantes bajas. Me río de los que dicen que el Tottenham está aquí por suerte”, explicó el técnico argentino para Marca.