Lewandowski 'asiste' a la fiesta de Gnabry

El Bayern atropella al Chelsea

MOVISTAR

Albert Gracia

Otra vez la misma dupla. Otra vez en Londres. Otra vez en la Champions. Lewandowski y Gnabry aparecieron en una segunda mitad superlativa para dejar la eliminatoria vista para sentencia. Llegaba el Bayern como el gran favorito para llevarse el billete y decidió que para qué esperar a la vuelta. Goleada, paseo militar y a otra cosa.

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Champions League

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3
Alineaciones
Chelsea
Caballero; James, Azpilicueta (Pedro, 73'), Christensen, Rüdiger, Alonso; Jorginho, Barkley (Willian, 61'), Kovacic; Mount y Giroud (Abraham, 61').
Bayern Múnich
Neuer; Pavard, Boateng, Alaba, Davies; Thiago (Goretzka, 90'), Kimmich; Coman (Coutinho, 66'), Müller, Gnabry (Tolisso, 85'); Lewandowski.

El cuadro bávaro superó una primera mitad donde le faltó mordiente para explotar en la segunda y llevar a la lona a un Chelsea que bastante hizo con mantenerse en pie. No era el Tottenham como en la fase de grupos, pero el Bayern volvió a reinar en Londres. Venganza culminada. 

Decían que en la Champions todo se igualaba. Que daba igual como vinieran los equipos. Pantomimas. El Bayern llegaba como un tiro y lo demostró, aunque primero hubo que tantear al rival. En una primera mitad sin un gran dominio en la que no aparecieron demasiado Thiago y Kimmich, los bávaros ya advirtieron, con ocasiones, de que no iban a hacer prisioneros. Las tuvieron con un Lewandowski al que le faltó una punta de velocidad para salvar un par de salidas rápidas de Caballero y con un Müller en estado de gracia.

Sin centro del campo

Todo lo que pasaba arriba tenía la firma del espigado mediapunta alemán. Todo al primer toque. Todo con mala baba. El germano tuvo la más clara de toda la primera parte con un cabezazo que se marchó al larguero. Con la coronilla le dio. Daba igual. Le salía todo. Aun así, a los bávaros les costó adueñarse de un partido que no se jugaba en el centro del campo. 

Tocaba esperar. Esto era una carrera de fondo. Había que noquear al rival por asaltos. El Chelsea aguantaba atrás, sin ninguna presión, esperando los errores bávaros o que Giroud descolgara algún melón. Neuer tuvo un fallo y por poco no lo aprovecharon los ‘blues’ para adelantarse. Pero Mount no estuvo fino. Ni ahí ni en todo el partido. También la tuvo Marcos Alonso en la más clara del partido. Neuer repelió. El Chelsea creía que en un partido aguerrido podían tener su oportunidad. No sabían que el Bayern tenía balas en la recámara.

En la reanudación, el cuadro de Lampard se lo creyó y cuando parecía estar más que metido en el partido la dupla letal bávara saltó al ruedo. De Gnabry para Lewandowski, de Lewandowski para Gnabry y apunten el primero. Jugada de tiralíneas en una jugada sucesiva de despropósitos 'blues'. Golpe encima de la mesa y a seguir.

Gnabry y Lewandowski, de fiesta

Aún sin tiempo para digerir lo sucedido, el Chelsea se encontró con un 0-2 que fue una auténtica losa. Otra vez los mismos protagonistas. Lewandowski la baja, Gnabry le tira una pared y el germano anota con un tiro cruzado. El rey de Londres en esta Champions tras el póker ante el Tottenham de la fase de grupos. El polaco 'asistiendo' a la fiesta. El resultado hizo daño, mucho daño a un Chelsea que no encontraba la forma de poder golpear a un Bayern sostenido por el partido excelso de los hombres de arriba y por un Davies monumental. 

Y es que el canadiense cuajó un partidazo haciéndose dueño y señor de todo el carril zurdo. Imparable. El joven lateral canadiense, de hecho, se inventó un carrerón por banda y asistió a Lewandowski para que el polaco se apuntara uno también. Cómo no. Undécimo tanto de 'Lewangolski' en esta Champions. Con el 0-3, el Chelsea intentó maquillar el marcador pero la expulsión de Marcos Alonso terminó por malbaratar cualquier esperanza. Este Bayern apunta maneras. Apúntenlo como un serio candidato para llevarse el título.