Laimer y Sabitzer dan alas al Leipzig

El Leipzig remonta al Zenit y se catapulta en su grupo

 El Leipzig se impuso a un Zenit que comenzó el choque ganando gracias al gol de Rakitsky / MEDIAPRO

X. Serrano

Triunfo importante del Leipzig para recuperar sensaciones y reengancharse a la lucha por entrar en octavos de la Champions League. Tras un primer tiempo gris y plano, los de Nagelsmann remontaron el tanto inicial de Rakitsky para imponerse en el segundo acto al Zenit de San Petersburgo con goles de Laimer Sabitzer. Así, los germanos rompen con una racha de cuatro partidos sin ganar. 

121202

Champions League

2
1
Alineaciones
Leipzig
Gulacsi; Klostermann, Orban, Upamecano, Mukiele; Kampl, Laimer (Demme, 86'); Sabitzer, Forsberg, Lookman (Poulsen, 69'); Werner (Cunha, 46').
Zenit San Petersburgo
Kerzhakov; Karavaev, Ivanovic, Rakitsky, Santos; Shatov (Osorio, 65'), Barrios, Ozdoev; Dzyuba, Azmoun (Kuzyaev, 75') y Driussi (Mak, 82').

El conjunto alemán arrancó el duelo decidido a acabar de una vez por todas con esta tendencia negativa. Suya fue la primera ocasión del encuentro, un zapatazo potentísimo de Laimer desde la frontal que Kerzhakov desvió a mano cambiada contra el larguero. Sabitzer volvería a avisar poco después con una volea igual de violenta pero mucho menos precisa. 

Pero pronto el arreón inicial germano quedaría atascado ante la solidez de un Zenit con las ideas muy claras. Su apuesta: aguantar atrás y salir rápido al contraataque en pocos toques. Balón largo buscando a Dzyuba y que la dupla Azmoun-Diussi rompan al espacio en la prolongación.

Tal vez un plan poco sofisticado, pero tremendamente dañino para un Leipzig graduado en los ataques al espacio pero con serios problemas en el ataque posicional. Más aún con el marcador en contra, desventaja que llegaría antes de la media hora después de que Rakitsky bajara con el pecho un balón suelto en la frontal y lo mandara a guardar con un zurdazo que hizo inútil la estirada de Gulacsi

La falta de profundidad y desequilibrio en los de Nagelsmann no hizo más que incrementarse tras el tanto. Valga como ejemplo este dato: al descanso, el Leipzig acumulaba más pases en el último tercio de campo que el Zenit en todo el césped. Total, para nada. Posesiones estériles, escasez de ideas. Tan solo Werner Klostermann, el más incisivo por banda izquierda, probaron a Kerzhakov en sendos remates blandos.  

En cambio, sin llegar a culminar ocasiones claras, el cuadro ruso daba la sensación de poder ampliar ventajas en cualquier contragolpe. Pero la historia cambiaría tras el deceso. En uno de sus primeros ataques, el Leipzig logró combinar en velocidad con espacios y Laimer, irrumpiendo por banda derecha, estableció el empate con un ajustado disparo cruzado. 

Pudo el Zenit devolver el golpe acto seguido, pero Shatov disparó a las nubes con todo a favor para marcar. Regalo que el Leipzig, en plena crecida, no perdonó. En su siguiente llegada peligrosa, los germanos se adelantaron con un golazo de Sabitzer. Escorado a la derecha, el austríaco bajó con el pecho un centro pasado de Klostermann y conectó una preciosa volea con el exterior que entró por la escuadra. 

Aunque Osorio marró en el área chica una oportunidad clamorosa que habría supuesto el empate, el conjunto ruso se diluyó con el avance del crono frente a un Leipzig que pese al cansancio logró administrar su ventaja.