Kingsley Coman, el 'regalo envenenado' de la Juventus al Bayern

Bayern y Juventus poseen un gran potencial y nombres que de una manera u otra unen sus destinos recientes. Es el caso de croata Mario Mandzukic, que fue de un equipo a otro con escala en el Atlético de Madrid. O el de Arturo Vidal, que fichó este pasado verano por el Bayern tras alcanzar la final de la Champions con la 'Vecchia Signora'.

Más desapercibida, a priori, fue la llegada de Kingsley Coman al Bayern, aunque al final se ha demostrado que la cesión con opción de compra del francés al equipo de Pep Guardiola solo puede interpretarse como un regalo inexplicable.

¿Quién es Coman?

Nacido el 13 junio de 1996, su llegada al mundo se produjo dos días antes de que España y Francia se enfrentaran en la fase de grupos de la Eurocopa de Inglaterra. Los galos afrontaban entonces su primera gran competición internacional tras el fracaso que supuso quedarse fuera del Mundial 94 y en aquella lista aparecían nombres como Zidane, Barthez o Thuram. Todos ellos resultarían esenciales en la conquista del Mundial de 1998.

Esa excelente generación es la que busca reproducir ahora el país y en ese proceso de reconstrucción el extremo del conjunto bávaro está llamado a tener un papel importante junto a hombres como Pogba, con quien guarda una especial relación. Juntos coincidieron en el vestuario de la Juventus tras dos operaciones similares, en las que el club turinés aprovechó el desencanto por la falta de oportunidades de dos jóvenes con ganas de comerse el mundo.

En el caso de Coman, la frustración le llegó en el PSG. Llegó a la cantera parisina siendo muy pequeño y, con el tiempo, la promesa se hizo realidad y acabó convirtiéndose de la mano de Ancelotti en el debutante más joven del club galo. Sin embargo, todo pareció quedarse en buenos propósitos y apenas tuvo más continuidad en el equipo. Decepcionado por la situación y por el vestuario -llegó a tachar a Ibrahimovic de "egoísta"- hizo todo lo posible por salir.

Su marcha a la Juve, en cambio, no mejoró la situación. Pese a que puede decir que saltó al campo en una final de la Champions League y que conquistó todos los títulos nacionales, tuvo un protagonismo más bien residual.

Dadas las circunstancias, lo normal hubiera sido verle esta campaña fogueándose en un club de rango inferior que le garantizara minutos. Pero fue el Bayern el que apostó fuerte por él y el experimento parece haber dado resultado. Pieza importante en el esquema de Guardiola, su desborde y velocidad le convierten en un elemento muy valioso para el técnico catalán. Además ya ha dejado varias actuaciones interesantes en Europa y ahora espera desquitarse del escaso apoyo recibido en el equipo al que de momento pertenece. Nada mejor que contribuir a su eliminación para demostrarles que ellos también estaban equivocados.