Insigne hace justicia ante un desconocido Liverpool

Roger Payró

El Liverpool pagó caro su horrible partido en San Paolo y eso lo aprovechó el Nápoles para llevarse un merecido triunfo después de ser el claro dominador en un segundo tiempo donde Insigne en el 90 hizo justicia y uso así el grupo patas arriba.

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Champions League

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Alineaciones
Nápoles
Ospina; Maksimovic, Albiol, Koulibaly, Rui; Hamsik (Zielinski, 81'), Allan, Fabián (Verdi, 68'); Callejón, Insigne y Milik (Mertens, 68').
Liverpool
Alisson; Alexander-Arnold, Joe Gomez, Van Dijk, Robertson; Wijnaldum, Milner (Fabinho, 76'), Keita (Henderson, 19'); Mané (Sturridge, 89'), Salah y Firmino.

El encuentro se esperaba mucho más animado pero el primer tiempo fue más bien plano, con poca profundidad en ambos conjuntos que se respetaron en exceso. Insigne tuvo el primero en un zurdazo que salió lamiendo el palo pero no fue una ocasión premonitoria de lo que sería el primer acto, ya que sólo Milik tras un gran reverso inquietó algo a Alisson. El Liverpool apenas pisó campo rival y además recibió la mala noticia de la lesión de Naby Keita, que tuvo que ser retirado en camilla.

Dominio del Nápoles en la segunda

En la reanudación, el Nápoles empezó a adueñarse del partido aunque no traducía el dominio en ocasiones claras de gol. Insigne, muy incisivo por la izquierda, comandaba los ataques partenopeos con Milik como socio. El polaco dispuso de la primera ocasión en la segunda tras un tiro desde la frontal que obligó a actuar de nuevo a Alisson.

El conjunto de Klopp carecía totalmente de la identidad que muestra habitualmente en sus encuentros y apenas se acercó a la meta de Ospina, ni tan siquiera en alguno de sus letales contragolpes. Carlo Ancelotti vio que su equipo tenía a tiro la victoria e introdujo cambios ofensivos para llevárselo. Y funcionó.

Primero avisó Mertens tras empalmar en boca de gol un envío al área que topó con el larguero. Los 'reds' sufrían y contaban los minutos para poder arañar un punto pero acabó muriendo en la orilla. Corría el minuto 90 cuando un centro raso de Callejón desde la derecha lo remató Insigne al segundo palo para dar tres puntos vitales al Nápoles y complicar la vida a un Liverpool muy desconocido y decepcionante.