Doma incompleta del Sevilla

Continúa invicto el Sevilla en la Champions. También continúa sin ganar. La parte buena de repartirse los puntos es que tanto pierde uno como el otro. El Sevilla ve alejarse al Salzburgo en lo más alto de la tabla pero mantiene su segunda plaza. Empate sin goles en el Pierre-Mauroy, donde los hispalenses domaron a los ‘dogos’ pero sin terminar de castigarlos. Los dos próximos partidos son en casa frente al propio Lille y al Wolfsburgo. Como mínimo deberá ganar uno para no pasar apuros.

Lille-Sevilla J.3 Champions

Champions League

LIL

0

0

SEV

Alineaciones

Lille
Grbic; Çelik, Djaló, Fonte, Mandava; Renato Sanches (Ikoné, 71'), Onana (Xeka, 71'), André, Bamba; Jonathan David (Weah, 82') y Yilmaz.

Sevilla
Bono; Navas, Diego Carlos, Rekik (Jordán, 57'), Acuña (Augustinsson, 64'); Óliver (Papu Gómez, 65'), Fernando, Delaney; Suso (Rakitic, 74'), Rafa Mir y Ocampos (Lamela, 74').

Goles

No hubo.

Árbitro

Michael Oliver (Inglaterra). T.A.: Çelik (59'), Ikoné (77'), André (88'), Yilmaz (92') / Lamela (87').

Incidencias

Stade Pierre Mauroy. Unos 48.000 espectadores.

Hubo tres sorpresas de inicio en el once de Lopetegui. Dos por gusto y una forzada. Óliver y Delaney acompañaban a Fernando en la zona ancha mientras que Rekik fue la pareja de baile de Diego Carlos en el eje de la zaga. Koundé viajó pero finalmente no entró en la convocatoria. No pasó apuros sin él el Sevilla, que sumó más integrantes de la defensa en la enfermería. Rekik tuvo que ser sustituido y Acuña se fue con molestias.

Lista de caídos aparte, el cuadro hispalense mantuvo la misma línea de todo el curso. Atrás todo son buenas noticias y arriba aparecen los nubarrones. Dio sensación de control a lo largo del partido aunque sin poder hincar el diente. Hoy le hubiera ido bien En-Nesyri, en la recta final de su recuperación.

Hubo mucha lucha pero pocas interrupciones. Y aún menos ocasiones. En el primer acto tiros lejanos de Suso y Yilmaz abrieron la cuenta para cada equipo en ese registro. Por decir algo. Las más claras sólo llegaron en sendas pérdidas de balón. La de Grbic la arregló Djaló bajo palos cuando el disparo de Rafa Mir se colaba y la de Acuña que pescó Renato Sanches la abortó Bono, muy firme.

Necesita al mejor Ocampos el Sevilla, que desde la lesión aún no ha mostrado su versión óptima. En una de las primeras que encaró obligó a volar a Grbic. Tuvo dos más que no terminaron de concretarse y lo probó incluso de chilena. En área propia el trabajo seguía siendo excelente. Diego Carlos, como buen mariscal, no dejó ni respirar a Yilmaz.

Poca pólvora en el primer tiempo y menos aún en el segundo. Lopetegui quemó los cambios –unos obligados y otros no- antes de llegar al último cuarto de hora aunque sin agitar lo suficiente al equipo. Buena imagen del Sevilla, que no es poco, pero no le bastó para conseguir los tres puntos. El Ramón Sánchez-Pizjuán dictará sentencia.