Aspirina para el 'Pupas'

El Atlético salva un partido deslucido con un gol en los últimos minutos

 Morata dio el triunfo a los colchoneros ante el Leverkusen con un gol al final del partido / MEDIAPRO

Jonathan Moreno

Europa es el oasis rojiblanco. Fiel a su filosofía, el Atlético de Madrid sufrió, peleó y encontró la recompensa con un tanto postrero de Álvaro Morata. Simeone tiene mucho trabajo por delante si quiere que su equipo opte a algo esta temporada. El argentino pierde a Giménez, con molestias en el muslo derecho.

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Champions League

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Alineaciones
Atlético de Madrid
Oblak; Trippier, Giménez (Hermoso, 15'), Felipe, Lodi; Koke (Morata, 70'), Herrera, Thomas, Saúl; Correa (Lemar, 62'), Diego Costa.
Bayer Leverkusen
Hradecky; Weiser, Sven Bender (Dragovic, 92'), Tah, Lars Bender; Bellarabi, Baumgartlinger, Demirbay (Alario, 83'), Amiri; Volland, Havertz (Paulinho, 76').

Concedió el Atlético la posesión por completo a su oponente. Nada nuevo bajo el sol. Se sentía cómodo el Leverkusen sobre el rápido césped del Metropolitano. La lluvia incesante sobre Madrid y el frío convirtieron el pasto en terreno resbaladizo. Factor que benefició a los velocistas alemanes, temidos por Simeone en la previa.

Advirtieron los de Peter Bosz con un derechazo de Baumgartlinger. La posesión era absoluta para el cuadro de la Aspirina. El técnico argentino braceaba en banda. Nada salía a derechas y corregía continuamente a sus pupilos. Los problemas aumentaron con la lesión de Giménez. El central charrúa miró a banda y solicitó el cambio. Retaguardia inédita en Canillejas, con cuatro fichajes del pasado verano. Precisamente uno de ellos, Renan Lodi, fue el único colchonero clarividente. El brasileño ofreció multitud de recursos, tanto en ataque como en defensa. Nadie le acompañó. Inexistente el centro del campo y aislada la delantera.

Afortunadamente para los intereses atléticos, la escuadra alemana no inquietó a Jan Oblak. El esloveno ni ensució los guantes.

La primera, a la red

Adelantó la línea de presión el Atleti tras el receso. Enmarañó la salida del Bayer, aunque expuso aún más su defensa a las transiciones germanas. Eso le valió para pisar más el área de Hradecky. Diego Costa peinó de manera defectuosa un centro de Trippier. Qué guante tiene el inglés en su bota derecha Acto seguido, el propio hispanobrasileño reclamó penalti de Lars Bender. Piscinazo de manual del delantero. Pero valió para caldear el ambiente del Wanda.

Simeone leyó el estado de ánimo de los suyos. Lemar y Morata, a escena. Necesitaba pólvora el Cholo. Y los dos atacantes actuaron de revulsivo. Recogió entre líneas el francés, abrió a banda derecha para el Lodi y el brasileño la puso en el primer palo para que Morata, llegando con potencia desde atrás, doblara la muñeca a Hradecky. Con el 1-0 en el luminoso, Santo Grial del ‘cholismo’, los rojiblancos recobraron la confianza. Poco más se jugó.