Òscar García perdona al díscolo Emre Mor

Òscar García, entrenador del Celta de Vigo

Òscar García, entrenador del Celta de Vigo / EFE

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Parece haberle sentado bien el Erasmus en Estambul y Atenas a Emre Mor. Después de dos temporadas y media decepcionantes en Vigo, el Celta cedió al futbolista turco, aunque nacido en Dinamarca, a Galatasaray y Olympiacos. 

El otomano completó la pretemporada con la escuadra celeste, pese a que aparecía en todas las quinielas para abandonar Balaídos. Òscar Garcia le ha dado una segunda oportunidad y reinsertado en la plantilla olívica hasta tal punto que fue titular en el estreno liguero ante el Eibar en Ipurua. El técnico vallesano no quiere lanzar las campanas al vuelo, pero sabe que con Emre Mor son un equipo más potente en ataque. No en vano, el club gallego abonó 13 millones al Borussia Dortmund por hacerse con sus servicios.

“Tenemos que ir con calma con él. Cuando me dijeron que haría la pretemporada con nosotos, todo el mundo me habló muy mal. No encontré una persona que hablara bien de él. Yo soy de dar segundas oportunidades y el año pasado Pione Sisto también venía jugando muy poquito e intenté recuperarlo. Son jugadores diferentes y diferenciales. Hay que intentar comprenderlos, pero siempre desde el principio que lo más importante es el equipo”, declaraba el entrenador de Sabadell.

Ahora la pelota está en el tejado del díscolo Mor. De él depende hacer carrera y demostrar su talento.