Así recibió San Paolo al traidor Higuaín

Desde antes del pitido inicial el protagonista del Nápoles-Juventusha sido Gonzalo Higuaín. Muchos aficionados ‘azzurri’ esperaban este partido desde el momento en el que supieron que el argentino se marchaba al eterno rival. La traición dolió tanto que, pocos días después de la oficialización de su traspaso, una casa de apuestas organizó un intercambio de camisetas: “trae tu camiseta con dorsal de Higuaín y te damos una limpia, sin su nombre”.

A lo largo de la temporada, los ‘tifosi partenopei’ no han dejado de demostrar su malestar con el ariete argentino, estaba llamado a ser el heredero de Maradona, el hijo pródigo que devolviese al Nápoles a la gloria… Pero el ‘corazón ingrato’ prefirió marcharse con la ‘Signora’.

Durante estos últimos días, a los pies del Vesubio han preparado un sinfín de objetos para recibir al Pipa. Papel higiénico con su cara, bufandas anti Juventus. fotos del delantero dentro de un retrete y, lo más destacado, una enorme cantidad de silbatos azules repartidos en San Paolo para que el número nueve ‘bianconero’ no dudase en notar no era bienvenido. Ya desde el calentamiento, la grada napolitana no dudó en usarlos y cada vez que el ‘Pipita’ tocaba un balón el ruido era ensordecedor y el cemento del estadio temblaba.

Pero hay una persona en el estadio que en el fondo sigue guardando cariño al villano que un día fue ídolo: Sarri. Su ex entrenador no negó haber tenido momento de ira, “pero siempre ha habido amor e Higuaín hizo historia en Nápoles”. Con el récord de 36 goles en una sola temporada y los 71 tantos en 104 partidos de liga italiana, Higuaín casi se había ganado un puesto al lado de San Gennaro, patrón de la ciudad, pero la traición ha superado cualquier hito futbolístico y será prácticamente que los ‘partenopei’ la olviden.