Osihmen aleja a Mou de la 'Champions' y asienta el liderato del Nápoles

El nigeriano desequilibró el partido en el tramo final

Los napolitanos se sitúan con tres puntos de ventaja respecto el Milan

Hirving Lozano defiende un balón ante la Roma

Hirving Lozano defiende un balón ante la Roma / AFP

EFE

El solitario gol del nigeriano Victor Osihmen en los compases finales decantó este domingo el 'Derbi del Sole' ante el Roma (0-1) y relegó a los de Mourinho a la quinta plaza, fuera de los puestos de Liga de Campeones, al tiempo que mantuvo el sólido liderato de un Nápoles que esta vez no exhibió esa superioridad a la que ha acostumbrado en este inicio de campaña, maniatado por una gran versión del conjunto 'giallorosso'.

Roma Nápoles 23/10/22

Serie A

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Alineaciones
Roma
R. Patrício; Mancini (Viña, 82'), Smalling, Ibáñez; Karsdorp (El Shaarawy, 82'), Cristante, Camara (Matic, 82'), Spinazzola (Shomurodov, 85'); Zaniolo, Abraham (Belotti, 64'), Pellegrini.
Nápoles
Meret; Di Lorenzo, Min-Jae, J. Jesus, M. Olivera; Ndombele (Elmas, 57'), Lobotka, Zielinski (Politano, 75'); H. Lozano (Gaetano, 75'), Osimhen, Kvaratskhelia.

El Estadio Olímpico de Roma acogió un duelo de altura entre dos equipos que están cuajando un gran inicio de campaña. Mourinho y Spalletti, exentrenador del Roma, saltaron con todo desde el inicio para el 'Derbi del Sole'. Y se notó. Fue una primera parte muy disputada, intensa, plagada de duelos individuales por la presión alta al hombre que ejercieron ambos equipos y en la que solo faltaron las ocasiones claras.

Smalling y Osihmen protagonizaron el duelo físico en un lado del campo, Kim Min-Jae y Abraham en el contrario. Sin embargo, fue Zaniolo el que puso la calidad y generó la mayor parte del peligro para la 'Loba' y Lozano el que lo hizo en el conjunto partenopeo.

Kvicha Kvaratskehlia, la nueva estrella de la Serie A, atrajo todas las miradas pero esta vez no pudo sacar partido a sus virtudes, bien cubierto por Karsdop y Mancini, que no le dejaron respirar.

La tensión se notó desde el principio también en los banquillos, con Spalletti y Mourinho muy encima de sus jugadores y del árbitro. Especialmente el luso, que fue una de las atracciones del primer acto, enrabietado con cada decisión arbitral, con cada jugada, dando instrucciones a sus jugadores, arengando a la grada, pidiendo explicaciones al linier y que acabó siendo protagonista en el episodio clave de los primeros 45 minutos con una airada protesta tras el penalti señalado sobre Rui Patricio que finalmente, VAR mediante, el colegiado anuló y que los 'tifosi' romanistas cerraron con una ovación para el setubalense.

Nada más comenzar el segundo acto avisó el Nápoles. El peligro de 'Kvara' reside en que no necesita estar especialmente acertado para generar peligro. Lo volvió a demostrar este domingo con un recorte que dentro del área y un potente disparo que taponó Smalling a medio camino. Salió mucho mejor el Nápoles, que tuvo otra grandísima ocasión en los pies de Juan Jesús que el central no acertó a rematar dentro del área.

Mourinho se ganó la amarilla por otra protesta desmedida sobre una decisión arbitral. Movió ficha el técnico 'giallorosso' y dio entrada al 'Gallo' Bellotti por un Abraham que pese al buen trabajo físico no generó demasiado peligro arriba.

Hasta el minuto 70 no llegaron las ocasiones claras, pero lo hicieron seguidas. El Roma golpeó primero con una buena contra en la que Pellegrini no controló bien ya dentro del área y cedió a Camara en la frontal para que golpeara de primeras. Sin embargo, Lobotka, rápido, hábil e inteligente, fue la suelo y le rebañó lo justo el balón para montar el contragolpe. Condujo Elmas, puso un balón medido en profundidad para Osihmen y el nigeriano cruzó demasiado.

Recibió Spalletti también la cartulina amarilla. La tensión iba de lado a lado, de banquillo a banquillo, en función de quien gobernase el partido en cada momento. Ninguno de los técnicos lo veía claro.

Pero entre tanto reparto de dominio y de ataques infructíferos, gracias a las buenas acciones defensivas, apareció Osihmen para decantar la balanza. El nigeriano, conocido por no dar un balón por perdido, le ganó el duelo a Smalling y desde el perfil diestro, bastante escorado y casi sin ángulo, enganchó un potente balón cruzado que sorprendió a Rui Patricio. El gol dejó muy tocado a los 'giallorossi' y el Nápoles se creció.

Terminó el partido y la tensión acumulada se liberó con una pequeña tangana en el centro del campo, rápidamente apagada por los propios jugadores y sus respectivos cuerpos técnicos. El Nápoles, más líder que nunca y ya con los deberes hechos en Liga de Campeones, se llevó tres complicados puntos de la capital italiana, dejando al Roma quinto, fuera de 'Champions' y con la urgencia de vencer este jueves al HJK finlandés en Liga Europa.